La buena: Cruz Azul no se vende. La mala: no tiene el gran presupuesto de años anteriores y por eso ha dilatado en las renovaciones de sus jugadores, y casi está descartado algún refuerzo de renombre. Bajo ese escenario, hoy, el campeón del futbol mexicano reportará por la tarde a las instalaciones de La Noria para preparar el Apertura 2021, donde el objetivo es el bicampeonato.
NO ESTÁ EN VENTA
Para nadie es un secreto que La Máquina atraviesa un periodo de austeridad, en el que buscan sanear las finanzas del equipo, luego de las auditorías que se están realizando de la gestión de Guillermo Álvarez Cuevas.
Tal situación ha provocado que en las últimas semanas los rumores sobre una supuesta venta del equipo hayan circulado en las redes sociales; sin embargo, desde la dirigencia han descartado esta posibilidad.
“Ante el reciente e inexplicable rumor, sin fundamento, sobre la supuesta venta de Cruz Azul Futbol Club, hacemos de su conocimiento que nuestro equipo no está, no estará a la venta”.
Y, además, la Cooperativa afirmó que no hay una crisis económica que afecte al club: “Cooperativa La Cruz Azul goza de cabal salud financiera y, hoy más que nunca, Cruz Azul es un símbolo de México que, evidentemente no se vende y que, por el contrario, aún tendrá muchas historias y títulos que celebrar”.
Eso sí, dentro la política de austeridad de la cementera estuvo la de desaparecer al Cruz Azul Hidalgo, quien hace unas semanas jugó la final de la Liga Premier (Tercera División); a los jugadores que terminaron contrato se les otorgó su carta de derechos federativos, mientras que algunos más serán reacomodados en las demás categorías.
RENOVACIONES Y EL CASO RIVERO
Hoy el equipo reportará por la tarde en La Noria para empezar sus trabajos de pretemporada. Se espera que en esta semana firmen su nuevo contrato elementos como Jesús Corona y José “Shaggy” Martínez, quienes lo finalizan el 30 de este mes. Con Pablo Aguilar ya se llegó a un acuerdo para renovar por un año más y hoy estampará su firma.
Otro de los casos que está pendiente es la negociación por el uruguayo Ignacio Rivero, quien fue de los elementos más constantes en el once de Juan Reynoso. Cruz Azul tiene hasta el 30 para hacer válida la opción de compra; sin embargo, el precio de Nacho es de 4.5 millones de dólares, cantidad que La Máquina no puede desembolsar en estos momentos.
De entrada, se ofrecieron algunos elementos como parte de un intercambio, pero Xolos quiere el dinero o, en dado caso, tener de vuelta al jugador, pues se dice, tendría una buena oferta de Tigres para hacerse de sus servicios. Lo cierto es que hoy se ve complicada la compra del charrúa para La Máquina.
ROMO Y ORBELÍN
Hasta el momento la única baja confirmada de Cruz Azul es la de Elías Hernández, quien regresó a León; sin embargo, podría no ser la única. La directiva se comprometió a facilitar la salida de aquellos elementos que tengan alguna buena oferta del extranjero si se lograba el título. Tal podría ser el caso de Luis Romo, quien es pretendido por el Celta de Vigo, aunque todavía no hay una oferta concreta por el mediocampista celeste; también se habla que otros equipos españoles podrían ir por Luis.
En el caso de Orbelín, las pláticas para su renovación –su contrato termina en diciembre– comenzaron hace unas semanas, pero no ha habido un arreglo en la parte económica. A Cruz Azul le urgiría llegar a un arreglo o, en dado caso, participar en una venta en esta ventana de traspasos, pues en seis meses se iría como jugador libre.
Hasta el momento el equipo no ha tenido ninguna alta, pero Juan Reynoso ha dejado en claro que le gustaría al menos un par de elementos en la parte defensiva para reforzar la zaga y las laterales. Lo que sí, es que no será un marcado fácil para Cruz Azul que, así como van las cosas, su mayor triunfo sería mantener la base del equipo que rompió los 23 años sin título.