Uriel Antuna tiene ante sí una de las decisiones deportivas más importantes en su joven carrera. A los 22 años el duranguense tendrá que elegir entre seguir peleando por un sitio en el Galaxy de la MLS donde no es titular, pero ya ha pagado el derecho de piso, o venir a Chivas y abanderar el proyecto 2020 del Rebaño Sagrado.
Antuna acabó contrato con el Galaxy tras la eliminación a manos de LAFC, Chivas se abrió de capa por el delantero emergente de la Selección Nacional absoluta y lo pretenden traer, pero hay muchos intereses en torno a este jugador.
Los derechos federativos de Antuna le pertenecen al Manchester City y al Santos Laguna quienes son los dueños del pase, así que primero Chivas debe convencer totalmente al atacante de Gómez Palacio de venir a jugar a México.
El Galaxy está fuera de la ecuación para Chivas, Peláez no tiene que buscar la anuencia con el equipo angelino, el problema con ellos es que quieren un nuevo préstamo por un año con opción a compra y la oferta más que económica es que Antuna puede ser la gran figura del cuadro de la galaxia y seguir viviendo en Los Ángeles, actualmente su esposa está embarazada y le están vendiendo la idea de el mejor futuro para el primogénito.
Chivas busca un préstamo de un año con opción de compra, para este jugador quien no entra en los planes inmediatos del City.
La transacción aún no está cerrada y Peláez lo quiere seducir de que es el jugador idóneo para el nuevo proceso de Chivas.
Ahora el Rebaño va de frente contra el Galaxy que busca retenerlo, la última palabra la tiene el jugador, si viene a Chivas o se queda en Los Ángeles. Peláez quiere una respuesta definitiva antes de la segunda semana de noviembre.
JMH