Antonio Briseño pasó sin ningún problema los exámenes médicos con las Chivas del Guadalajara, el zaguero tapatío volvió a casa tras dos años en Portugal y ahora lo hace con la mira puesta en la titularidad con la rojiblanca.
De pasado rojinegro, el Pollo hoy se concentra en su presente con el chiverío y se ve y se dice feliz. El Pollo es un zaguero de 25 años de edad que llega a reforzar al equipo y ponerse a las órdenes de Tomás Boy.
“Yo ya estoy para jugar, yo no descansé, yo he estado entrenando”.
¿Vas a agarrar el 4?
“No sé, ese lo trae Toño (Rodríguez)”, quien el viernes ante River Plate jugó con el 4 en la espalda porque el 1 lo usa Raúl Gudiño.
Briseño señaló que no puede hablar hasta su presentación como rojiblanco y que se siente bien por esta nueva aventura en el futbol mexicano con el Rebaño Sagrado.
“Bien, contento, gracias por venir, sé que tomaron su tiempo y cuando pueda hablar y tenga permiso del club para hablar, lo haremos. Estoy muy contento que estamos ya casi del otro lado”.
JMH