Un grupo de barristas de Chivas fueron este día a las inmediaciones del club tapatío para tener una audiencia con los referentes del plantel.
Al grupo de aficionados los recibieron jugadores de peso, como el capitán Jaír Pereira, Jesús Molina el sub capitán, Isaac Brizuela y un par más de la cantera quienes tienen un valor importante en el vestuario.
Cabe destacar que pese a que se habló fuerte de ambas partes, no hubo amenazas, ni ningún tipo violencia.
Los barristas de Chivas saben que la situación por las últimas derrotas está al rojo vivo y fueron a pedirle compromiso y unión a los líderes del equipo, hay muchos jugadores que no están corriendo lo suficiente, a los ojos de los barristas, se dijeron nombres propios y de parte de los jugadores hubo mucha apertura, los escucharon, también hablaron, se intercambiaron palabras y hubo un compromiso de parte de los futbolistas de dar un extra ante León, que busca un triunfo más para lograr una marca histórica en el futbol nacional.
Los barras dieron la cara, nadie habló desde el anonimato, ni elevaron el tono de voz, pero sí expresaron el descontento por las ocho jornadas sin ganar y por la eliminación ante el América.
Finalmente, los barristas expusieron que se debe mostrar una mejor cara en los últimos dos partidos de la temporada y se fueron sin amenazas, sin ningún tipo de postura radical, simplemente era el momento de dejar sentir cuál es el pensamiento del seguidor rojiblanco, que hace el esfuerzo semana tras semana para estar con el equipo.
Este tipo de presión en otras latitudes suelen ser totalmente violentos, pero hoy la gente del Rebaño se acercó y optó por el diálogo y por hablar de frente ante los referentes del plantel.