En medio de la polémica por la manera tan intempestiva en que quieren acabar con el Ascenso MX en México, en el Rebaño Sagrado hay jugadores que al pasar por la división de plata vieron el despegue de su carrera como el Gallito Vázquez. En Celaya en 2011 se consagró bajo el mando de Miguel de Jesús Fuentes, pero su punto más alto lo logró con el León donde fue determinante para el regreso a primera.
La del Gallo no es la única historia, Canelito Angulo debutó profesionalmente en el Ascenso, es un ídolo en Dorados y su techo era más alto y ahora juega en Chivas. Briseño y Ronaldo Cisneros bajaron a la segunda categoría, para volver con más madurez y un mayor temple.
Antonio el Pollo Briseño jugó el Apertura de 2016 con FC Juárez, disputó todos los minutos y recuperó nivel, de ahí regresó a Veracruz, Para dar el salto a la Liga Nos de Portugal.
Gallo Vázquez disputó 28 juegos en la liga de plata, con el Celaya demostró grandes cosas, en un principio Vázquez era extremo, pero la experiencia de Fuentes lo puso de contención y ahí se consagró como ídolo del León y llegó a jugar un Mundial de titular.
Gallo Vázquez es la prueba viviente de que el ascenso pule y sirve de catapulta al máximo circuito, el León bicampeón de Matosas no sería lo mismo sin el Gallo Vázquez.
Ronaldo Cisneros un talento emergente quien llegó muy joven a Chivas también fue a pulirse a la división de plata, Ronaldo hizo cuatro goles en dos torneos, uno con Zacatepec y otro con Mineros y jugó 24 encuentros mostrando sus cualidades en esa categoría.
El caso de Jesús Angulo es una prueba de que si hay talento y que puede acabar en Primera División, con Dorados desde 2016 a 2018 jugó más de 40 duelos en el ascenso y mostró que su techo era en otras latitudes, fue a Necaxa donde se consolidó y después fue buen vendido a Chivas. Negocio redondo para sus formadores en Culiacán quien le sacaron renta al buen nivel que mostró Angulo.