El centrocampista Mauro Lainez, de los Xolos de Tijuana del futbol mexicano, reveló este miércoles que ha superado un problema de estrabismo que le causó conflictos en el equipo León con el entrenador argentino Gustavo Díaz.
"Entrenaba con unos lentes de vidrio grueso que eran incómodos; de otra forma veía borroso y doble. Nunca me tomaron en serio, pensaban que fingía lesiones o que no daba todo en los entrenamientos", dijo.
Mauro, hermano de Diego Laínez, jugador del Betis de Sevilla, aseguró que vivió una experiencia amarga al no sentir respaldo en su anterior equipo cuando dio señales de tener problemas visuales.
Al sentir que León no le ayudaría con el estrabismo, decidió operarse por cuenta propia, ya que lejos de llegar a un acuerdo fue acusado de faltar a una convocatoria para un partido, lo que la directiva tomó como una indisciplina.
"Tenía el contrato de un jugador juvenil, no alcanzaban mis ahorros para pagar la operación, así que mi familia fue la que aportó el dinero. Esperaba un reembolso o que entrara la factura de seguro de gastos mayores, sin embargo no hubo respuesta, al final mis papás me dijeron que me concentrara en jugar", agregó.
Los derechos federativos de Mauro Lainez pertenecen al Grupo Pachuca, empresa dueña de los equipos Pachuca y León en Primera División y del Zacatecas de la liga de ascenso, sitio al que pensaban mandar a Mauro Lainez.
"A pesar de todo soy un agradecido con la empresa porque me dio la oportunidad de debutar. Ellos me hablaron para ir al Zacatecas, pero conozco la liga de ascenso, al entrar en ella es difícil salir, la gente no sigue esos partidos, por eso decidí jugármela con Lobos BUAP de la Primera división", explicó.
La decisión no fue fácil para Lainez. En el 2018 ingresó a las filas de los Lobos, un equipo modesto ya desaparecido futbol mexicano y que era dirigido en aquel momento por el mexicano Francisco Palencia.
"Tras operarme del estrabismo todo cambió en mi vida. De dos años para acá, desde que estuve en Lobos y ahora en Tijuana, todo ha marchado fantástico", aseguró.
El cambio para Laínez ha sido sustancial. Con León acumuló sólo 36 minutos de liga. A partir de su operación, jugó con Lobos de Puebla 27 partidos y su rendimiento le alcanzó para fichar con Tijuana desde agosto de 2019 con los que acumula 23 juegos y tres goles.
"Jugué poco en León, pero lo hice bien, pensaron cosas malas de mí en los entrenamientos que no eran justas, mancharon mi nombre. Ahora todo es diferente. Mis papás me recalcaron que era mi última oportunidad de trascender, que una vez recuperado de mis ojos era el momento de demostrar lo que valía", agregó.
Lainez, nacido en Tabasco, al sureste de México, estableció que desea quedarse en Tijuana, equipo al que le ha tomado cariño luego de que el entrenador colombiano Óscar Pareja lo arropara.
"Me siento consolidado y feliz, motivado en Tijuana. Debo agradecer a Pareja que me trató como un padre. Ahora con el entrenador Gustavo Quinteros quiero jugar bien para respaldarlo. Sueño con ser campeón con Xolos y si sigo así, pienso en llegar a selección mexicana", concluyó.