En medio de la crisis un poco de árnica. La directiva de Pumas toma la palabra y saca el extintor para tratar de contener el incendio. Nadie mejor que la figura de Miguel Mejía Barón para hacerlo. Mensaje claro y contundente, directo y lleno de serenidad. Se asume el momento álgido, se promete trabajo, porque no hay fórmulas mágicas. Y sí, se cree en Andrés Lillini como la persona indicada para comandar el barco. Voto de confianza y adiós a la ola de especulaciones.
Aparece la figura de Mejía Barón en el auditorio de La Cantera y transmite paz, la justa y necesaria que el momento del equipo demanda. Emite su mensaje y después escucha y solventa cada interrogante. El directivo no es un personaje que le guste el foco, pero el entorno que vive la institución demanda su experiencia.
“He estado muy inquieto, creo que el resultado en Barcelona fue un golpazo tremendo y ha tenido consecuencias, ha provocado una serie de rumores y dudas sobre lo que puede pasar con Andrés Lillini y su cuerpo técnico…y va a quedarse con el apoyo de todos nosotros, hablé con los muchachos, y les dije lo mismo, Andrés Lillini se va a quedar en el club, es una decisión total de parte de la directiva, yo he dicho que es el entrenador ideal para este club”. Punto final a esa idea de un posible cambió de entrenador.
Mejía Barón aseguró que el respaldo a Lillini no es pasajero, que el estratega cuenta con la confianza total y no pasajera. “No, no es a corto plazo, es a largo plazo, el torneo va a terminar con Andrés, su cuerpo técnico y jugadores, se va a trabajar por un mejor lugar, no es a corto plazo”. Pero qué es lo que ve la directiva que ha impedido que el equipo fluya, cuál es el diagnóstico que se tiene.
“Yo lo que creo así de una manera burda y simplista es que hay gente nueva que necesita tiempo para entre ellos mismos conocerse. La llegada de Alves ha sido un suceso en muchos sentidos, pero él también necesita conocer a sus compañeros. Nos está faltando coordinación y conocimiento entre los jugadores que están dentro de la cancha”, valoró.
Sin cláusulas especiales con Alves
Mejía Barón abordó esa idea que flota en las redes sociales de que hay en el contrato de Dani Alves hay una cláusula que condiciona la titularidad del brasileño.
“Lo de Barcelona ha coincidido con la llegada de Alves, y en esas conjeturas ingeniosas me encontré con una que están suponiendo que hay una cláusula en el contrato de y digo que buena imaginación y que buenas ideas para entrar en polémica porque la polémica vende, pero ustedes deben también pensar que cualquier profesional que se preste de ser serio no aceptaría una tontería así de ese tipo; entonces, eso no existe, eso que se imagina alguna gente de que hay cláusulas que obligan al director técnico que (Alves) actúe los 90 minutos puedo certificar que no es verdad”.
Aclarado el tema de Alves, Mejía Barón insistió en que sólo queda seguir trabajando en que el equipo logre una identidad en el campo, algo que solo se logrará con trabajo, pero sin poner de pretexto el calendario, señaló que hay poco margen para ello, porque todos los equipos tienen una carga de trabajo intensa y se dosifican esfuerzos.
Viejo lobo de mar, Mejía Barón dijo que si en el entorno se habla de crisis, es una palabra que no debe asustar, pero tampoco se lo toma a pecho “A mí no me espanta la palabra crisis, si hay que utilizarla, lo utilizaremos natural, estar en crisis es parte de los retos de la vida, como grupo, no solamente aquí, más allá del futbol, yo acepto crisis, si debo pensar que es un bache también. Hoy estamos en alarma, descontentos, y angustiados, pero confiados en la capacidad de la gente que tenemos”.
El grupo está afectado
Sobre la charla que tuvo con el equipo y el estado anímico en el que encontró al grupo, señaló que ve un plantel afectado, pero también hizo lo posible por transmitirles confianza para salir de este trance cuanto antes.
“El grupo está consternado, es lo más cercano al sentimiento que he detectado ahora que estuve con ellos, deben imaginarse, son muchísimos goles, lo de Barcelona fue un mazazo terrible a la mentalidad que existe en cualquier equipo, es lo que puedo decir, está preocupado y consternado, el ambiente está terrible, pero son cosas que no nos espantan, lo único que nos puede sacar de este bache es la unión y la confianza de este equipo, que está diseñado por el entrenador, estamos convencidos de que debe continuar y tenemos la esperanza de que se revierta, pero la exigencia para Pumas y para todos los equipos de la liga, es grande, queremos revertir esto a través de la fuerza y personalidad de los jugadores”.
AGB