En las últimas semanas, los gritos homofóbicos y racistas han aparecido en los estadios de futbol. Además del ya conocido “ehh, puto”, hace unos días en el partido entre Atlético de San Luis y Tijuana, los aficionados en el Alfonso Lastras Ramírez insultaron a Miler Bolaños, lo cual les costó un castigo.
Sobre estas conductas, Miguel González habló y las reprobó, al considerarlas que no aportan nada y solo hieren.
“En España ha pasado mucho con eso, no creo que el pueblo sea homofóbico o racista, son gritos que se dan en el futbol, afortunadamente están desapareciendo, el futbol es una fiesta y los insultos no sirven de nada, un grito racista no te hace ganar un partido”, dijo el entrenador español al término del entrenamiento en La Cantera.
Míchel también compartió que fue objeto de estos insultos cuando era jugador, al ser llamado “maricón” y aunque negó que llegara a afectarle, si es un problema que viven muchos jugadores, e incluso algunos aficionados se escudan desde sus celulares.
“Me da un poco de rabia porque eso no es identificativo con la afición, yo lo viví, para ellos era muy gracioso ir a gritarme maricón, yo no tuve ningún problema con eso, pero no creo que sea identificativo, ahora con los celulares se creen conocidos, pero son conocidos por pendejos”.