Siempre ha sido un tipo frontal, le gusta llamar las cosas por su nombre y al técnico, Ignacio Ambriz, no le da miedo reconocer el fracaso que ha sido su gestión al frente de los Diablos Rojos del Toluca, donde nunca pudo encontrar un buen funcionamiento del equipo, está casi fuera de la posibilidad de recalificación, pero con in reto pendiente: evitar que el club pague multa económica al final del torneo.
"Habrá que esperar cómo queda todo, saber si nos la tenemos que jugar en un solo partido, hablar con los jugadores, del compromiso. Yo me hice responsable con el consejo que no pagaríamos multa, el mal torneo no me lo quita nadie, aunque hubiéramos entrado al repechaje. He dado mi mejor trabajo, pero no me salió nada".
Dependerá del resultado de Tijuana vs Querétaro para saber si Toluca baja hasta la antepenúltima posición porcentual, de ser así, se jugaría ante León, en la última fecha, la posibilidad de evitar el pago o definitivamente invertir 33 millones de pesos por su mal porcentaje.
Ambriz también habló del regreso de los cuatro jugadores 'cepillados' a la alienación escarlata, explicó que fue una decisión de todo el grupo.
"Al final el grupo hablo conmigo, con los cuatro jugadores importantes que estaban afuera, platicaron con los muchachos para estar unidos; pero es buscarle muchos pies a un malísimo torneo que hemos hecho, soy responsable, hoy son el más malo entrenador, no soy de excusas, me siento avergonzado, la rueda de la fortuna se quedó abajo, queda un partido para jugar el tema porcentual, de lo de más soy el responsable del mal torneo".
RGS