Noche negra para la afición del Monterrey, no solo por la eliminación ante San Luis en los cuartos de final del Apertura 2023 de la Liga MX, sino por la violencia presentada al término del partido.
Una vez culminado el encuentro las emociones comenzaron a calentarse cuando aficionados de la Pandilla arrojaron cerveza hacia el autobús del equipo desde los accesos de la Puerta 1.
Las agresiones se volvieron físicas por esa misma área cuando un grupo de asistentes intercambiaron golpes con miembros de Staff y seguridad que habían presente en los accesos a las zonas VIP.
También fue en la puerta 10 donde se suscitaron conatos de bronca en donde elementos de seguridad intervinieron para poder controlar las acciones violentas.
En las inmediaciones del estadio la gente abandonó el inmueble con bronca y con gritos y reclamos; algunos se vieron rebasados por el alcohol y sustancias, pero se limitaron a agresiones verbales en contra del Club Monterrey.
Las salidas del estadio fueron más pacíficas y al paso de 20 minutos, el bullicio después de la derrota y la frustración habían cesado en el Gigante de Acero.
MGC