La era de André Jardine en América empezó con un trago amargo, no se acaba ese sentimiento de frustración con el que acabó el torneo anterior, la herida que dejó Chivas sigue supurando. En el día que Jardine se presentaba en sociedad, el primer triunfo ante su gente se le fue de las manos, pues en la recta final los Bravos de Juárez le remontó. Un 1-2 que mantiene la decepción en la afición.
La expectativa por el debut del brasileño consistía en ver qué cara mostrarían las Águilas con respecto al pasado, porque sí, es cierto que bajo el mando de Fernando Ortiz se fracasó en el objetivo de alcanzar la final, que se cayó de manera dolorosa ante Chivas, pero también es cierto que el equipo ya tenía un sello y una propuesta que agradaba a la gente.
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Con André no hubo cosas extrañas, apeló a la continuidad, apostó por el 4-2-3-1. Una idea que los jugadores ya tienen asimilada. Hay cosas que irá permeando, pero en su debut mantuvo la coherencia, más cuando su equipo aún no está completo, pues anoche tuvo hasta seis bajas: cuatro seleccionados en la Copa Oro, más Fidalgo sancionado y Cabecita Rodríguez lesionado.
Mientras, la llegada de Julián Quiñones se termina de cocinar, los ojos se postraron sobre Kevin Álvarez, el lateral derecho que es, por ahora, el único fichaje, el joven le dará un tono de profundidad al equipo y creará mucho peligro por el sector derecho, pero Jardine tendrá que pulir su labor defensiva.
Amargo estreno
América se mostró agresivo, pero también faltó de contundencia, no logró concretar como se espera de una escuadra que está obligada a reivindicar su imagen. El primer gol de las Águilas y del torneo fue para Leo Suárez, en el cobro de una pelota parada, el balón se coló por la escuadra al 18’.
Bajaron las pulsaciones, no le pasaba nada al partido, Jardine movió el banco, lo tenía bajo control, pero en el cierre de partido a los Bravos les dio un ataque de valentía y a las Águilas uno de desorganización.
Primero, en un saque de banda tomaron mal parado al equipo y Aitor García remató cruzado en el área para vencer a Jiménez al 87’. Jardine no lo podía creer y en el tiempo de compensación se llevó las manos a la cabeza cuando Ángel Zapata marcó el 1-2 con otro tiro de media distancia. Sí, América no sale del trance y suma más tragos amargos y abucheos de su afición
DAO