América vuela en línea recta a la Liguilla, no cede terreno, no deja espacio para la duda, sigue a los suyo y mantiene el paso. Venció al Atlético de San Luis con la misma cuota de eficacia con la que ha doblegado a otros rivales. 3-0 y Fernando Ortiz iguala el récord de ocho victorias en fila que solo han logrado Miguel Ángel el Zurdo López y Jorge Solari.
Sí, la gestión de Ortiz sigue acumulando registros positivos, pero sobre todo, le sigue entregando a su tribuna un equipo que tiene ideas claras y no las traiciona, el Tano ha encontrado el equipo y solo ajusta por necesidad, de ahí en fuera nada de experimentos locos.
Fue un partido que América se trabajó a pico y pala, porque el San Luis vino decidido a impedir el juego de las Águilas, sabían los potosinos la calidad de rival que tenían delante y por ello optaron por plantear un partido basado en cerrar espacios.
Eso sí, le dieron un par de sustos a las Águilas, primero con un gol de Abel Hernández que fue anulado por una falta del delantero sobre Néstor Araujo, luego con un fuerte tiro de Facundo Waller que Ochoa repelió con una buena estirada.
No encontraba el América su juego, el conjunto rojiblanco le cerraba todos los espacios, había momentos en los que defendía hasta con una línea de seis jugadores. Era un bloque sólido que no dejaba resquicios ni por dentro ni por fuera.
Empezaba a desquiciarse el cuadro de Coapa, que trataba, pero no encontraba líneas de pase y las pelotas que colgaban al área tampoco causaban daño. Se estrellaban una y otra vez los americanistas a los que les faltaba también una cuota de más dinámica, pero justo antes del descanso se abrió el océano.
Henry recuperó en medio campo, tocó para Valdés quien proyecto a Rodríguez, pelota al espacio que no logró cortar la defensa potosina, el Cabecita controló, hizo su típica jugada, amague y fue hacia dentro para después sacar un derechazo que doblegó a Barovero al 44’.
El segundo tiempo tenía que cambiar totalmente, porque a San Luis ya no le valía resguardarse, tenía que dar un paso al frente y debía dejar espacios. Careció de recursos el equipo de Andre Jardine y en cuanto salió del fondo América le dio un par de cachetadas que lo terminaron desarticulando.
Primero, Valdés le ganó la pelota a Rodrigo González, parecía que había falta del chileno, quien entró al área y chutó, Barovero le puso el pecho a la bola, pero el rebote le cayó al mismo Diego que la empujó con la zurda al 53’. Los potosinos se enrabietaron con el árbitro, Víctor Alfonso Cáceres, quien no percibió nada.
Seguían con la cabeza caliente los rojiblancos y eso lo aprovechó América que logró el tercero dos tres minutos después, tras un buen pase de Zendejas que sigue inspirado, filtró para Henry que también definió de forma magistral con un remate cruzado.
Las Águilas se soltaron, ahora sí fueron el equipo de otras noches, se puso en plan tromba y el Cabecita se perdió el cuarto. No hubo más, todo estaba sentenciado. El América es el mejor equipo del torneo y el candidato número uno al título.
FCM