Cruz Azul se aferra a la vida. La Máquina venció 2-0 a Juárez en un duelo que no significó mayor problema. Ángel Sepúlveda y Uriel Antuna fueron los artífices de un triunfo que, además de ser el segundo como local, los mantiene con aspiraciones de clasificarse al Play-In, pues ascendieron a la posición número 13 con 17 puntos.
Mientras, Bravos se cae en la tabla, se quedó en 18 puntos y ya salió de la zona de clasificación.
Aún no están muertos
Cruz Azul se jugaba su última carta para clasificar a la fase final del torneo. Después del empate contra León, La Máquina recibió Juárez con la obligación de ganar y mantener las esperanzas, por eso, Joaquín Moreno mandó a lo mejor que tiene en su plantilla.
Los cementeros se volcaron al frente desde los primeros minutos, con un Uriel Antuna que pelea cada balón y lo mantiene para mandar algún servicio al área.
Fue precisamente el '7' de la Máquina quien recibió el esférico en la banda derecha y mandó un centro raso a primer palo, donde apareció Ángel Sepúlveda para poner el primer tanto del partido y el noveno en su cuenta personal en lo que va del torneo.
Los visitantes trataron de sorprender con una jugada por la banda, pero el servicio fue deficiente.
Cruz Azul dominó los siguientes minutos con aproximaciones por ambos sectores de la cancha, pero Bravos comenzó a encontrar espacios al contragolpe.
Diego Chávez le ganó la espalda a Salcedo e hizo una jugada individual y mandó un disparo cruzado, pero el balón pasó apenas desviado.
A pesar de que iban ganado, la presión celeste era evidente, pues en una jugada que en la que Juárez trataba de irse al frente, Carlos Salcedo discutió con Charly Rodríguez, aunque al final del primer tiempo, el “Titán” se acercó con sus compañeros para hacer las paces.
En el complemento, Moisés Vieira recuperó el esférico y mandó un trazo largo para Antuna, quien corrió y lo alcanzó, ingresó al área y buscó regresarle el favor al brasileño, pero el servicio se fue de largo.
Minutos después, Antuna volvió a la vida a los celestes. Rodrigo Huescas hizo el recorrido y se la pasó a Uriel, que avanzó unos pasos más y con poco ángulo a la portería, la mandó al fondo pegado al palo que defendía Talvera. La jugada fue revisada por el VAR por un posible fuera de lugar y el gol fue validado.
La Máquina sigue con vida y ahora tendrá que jugarse su futuro en 11 contra Chivas y Puebla.
AVV