Pumas se encuentra sumergido en una crisis, y no solo por la falta de contundencia, sino también por las constantes desatenciones y errores defensivos, los cuales llevaron al conjunto dirigido por Antonio Mohamed a perder el invicto al ser goleado 4-1 por Bravos de Juárez en la cancha del Olímpico Benito Juárez.
Las limitaciones del Club Universidad fueron exhibidas y ponen al Turco en el ‘ojo del huracán’, quien deberá trabajar a marchas forzadas para enmendar las fallas en cada sector de la cancha, ya que esto los pondría en serios problemas porcentuales, pues en este momento se encuentran en el lugar 15 de la tabla de cocientes, por debajo de Bravos y por encima de Necaxa únicamente por tres puntos; mientras que se encuentra arriba de Mazatlán por 11 unidades y 12 puntos por encima de Xolos.
Las anotaciones de Bravos de Juárez fueron obra de Santiago Ormeño, quien de penalti abrió el marcador al minuto 12; Diego Campillo al 32’ anotó un golazo, José García puso el tercero y Avilés Hurtado al minuto 81’ cerró la cuenta. El Chino Huerta acortó distancia al minuto 57’.
Con este triunfo Bravos de Juárez se colocó en el segundo lugar de la tabla general con 11 puntos; mientras Pumas cayó hasta el séptimo puesto con seis unidades.
Para la quinta Jornada de este Apertura 2023, Pumas recibirá a Tigres el próximo domingo en la cancha del Olímpico Universitario; mientras Juárez visita a Puebla
¡Muy Bravos!
Preocupación, desesperación y un dejo de tristeza se dibujaba en el rostro de Antonio Mohamed, quien no podía creer lo que sucedía en la cancha del Olímpico Benito Juárez.
Pumas se fue al descanso con una pesada losa de 3-0, marcador que exhibió todas las limitaciones del Club Universidad, las cuales elevan el grado de preocupación del Turco, pues ahora no solo deberá enfocarse en la falta de contundencia, sino también las constantes desatenciones y errores defensivos, que le permitieron a Bravos de Juárez ser superiores dentro del terreno de juego.
Eduardo Salvio, le abrió la puerta a los fronterizos para irse arriba en el marcador. El Toto perdió la marca en un tiro de esquina y al intentar recuperar su posición metió la mano, por lo que el árbitro central, Antonio López marcó penalti. Santiago Ormeño engañó por completo a Julio González para irse arriba en el marcador a los 12 minutos de iniciado el cotejo.
Pumas intentó igualar el marcador con un par de disparos de Gustavo del Prete, Toto Salvio y Gabriel Fernández, pero Alfredo Talavera fue factor para evitar que su meta se viera vulnerada; además de que un par de remates auriazules terminaron en las tribunas del inmueble.
A la media hora del encuentro, Diego Campillo marcó un golazo. El defensor tomó la pelota desde el medio campo y arrastró la redonda con la tibia marca de José Caicedo hasta los linderos del área desde donde sacó un riflazo para vencer a González.
Ocho minutos después, Bravos ponía el tercero en el marcador. En un tiro de esquina, José García convirtió en un hervidero el Olímpico Benito Juárez, pues llegó de atrás para meter un testarazo entre Ulises Rivas y el Chino Huerta para generar un rictus de vergüenza en la plantilla auriazul.
En los minutos finales, Pumas se volcó al frente para acortar distancia, pero ni el Toro Fernández ni el Chino Huerta lograron aprovechar una oportunidad muy clara de gol, donde Talavera ya estaba vencido y sus remates terminaron estrellándose en la zaga juarense y de esa forma irse al descanso con un descalabro parcial
Pumas va de error tras error
Para el segundo tiempo y con la ventaja de tres goles, el técnico de Bravos Diego Mejía decidió echarse atrás y defender el marcador sin la pelota, en busca de un contragolpe para liquidar el encuentro, situación que benefició al conjunto del Turco Mohamed, pues con la posesión de la pelota comenzó a tocar en repetidas ocasiones el arco de Talavera.
El Toro Fernández nuevamente se perdió una oportunidad muy clara, pues solo dentro del área envió un remate de cabeza por un costado, pero minutos más tarde, el nuevo ídolo felino sacó la garra, el coraje y el espíritu universitario para acortar distancia. El Chino condujo la de gajos hasta el área grande de Bravos para sacar un disparo, el cual escupió el arquero fronterizo. La redonda le llegó a Huerta, quien no perdonó y estremeció la red local. El tanto fue revisado en el VAR por una presunta falta de Juan Ignacio Dinenno, pero los encargados de revisar la repetición no observaron ninguna falta del comandante.
Parecía que el gol de Huerta le brindaba la confianza a los universitarios para gestar una heroica remontada, pero nuevamente un grave error de Julio González sepultó toda esperanza auriazul. Tras un centro que tenía controlado, el arquero felino soltó la redonda y en su afán de recuperarla cometió una falta sobre Avilés Hurtado. El colegiado decidió no marcar la falta, pero el VAR lo llamó para revisar la jugada, así que regresó al campo y señaló la pena máxima. Avilés cobró ‘picadito’ para poner el cuarto en la pizarra y finiquitar el encuentro.
FCM