La crisis se profundiza, sigue en caída libre el Rebaño Sagrado y suma su cuarto partido sin ganar y al final, sale con vida de San Luis.
El chiverío no defiende bien, están mal en el renglón físico, Raúl Gudiño el portero con calambres como si hubiera corrido como el contención. El segundo tiempo fue bueno para Chivas pero no ajustó para más, gran partido individual de Fernando Beltrán, pero siguen sin saber ganar.
Cinco goles sin respuesta sumando el segundo tiempo del Puebla y el primero en San Luis. Chivas no mete las manos, no compite, no genera y en dos jugadas individuales les hicieron la fiesta.
Al minuto 20 pelota profunda al venezolano Murillo quien abusó de Brizuela, llegó Flores a estorbar y no hizo nada y el balón le queda a Berterame quien en el suelo y sin ángulo la mandó a guardar, Gudiño ni cortó, ni bloqueó, ni estuvo cerca de la pelota. Chivas tenía el balón y los locales, el peor local del torneo lo ganaba, con una efectividad del 100 por ciento, una aproximación y un gol.
Macías tuvo dos y nada, pero en el primer tiro de esquina de esquina en contra llegó el segundo, Pocho Ponce marcaba a Olivas y Olivas a Mier y llegó Juárez rematando sin marca y Gudiño como en el primer gol, quedó lejos de la jugada. Dos por cero y Chivas lo perdía. El técnico desde la banca superado por la crisis se limitaba al triste "vamos, vamos".
Para el complemento se estaba gestando el milagro con dos errores de Marcelo Barovero, primero el Nene Beltrán al 48 de pierna derecha y se ponía lindo el partido, el Rebaño lo intentó y al 66 zapatazo de fuera del área y gol de Jesús Ricardo Angulo.
Empate a dos goles y quedaban más de 20 minutos por delante para la voltereta, aunque el San Luis le apostaba a todas a una contra.
Al final, empate con sabor a poco, Chivas no gana desde la vista al Juárez, otro empate que deja tristes a sus aficionados.
MGC