Canadá anunció que abrirá una investigación de la conducta policial por el trato a una diplomática de Senegal en Ottawa que fue esposada y "golpeada salvajemente".
El ministerio de Relaciones Exteriores en Dakar convocó esta semana al encargado de negocios de la embajada canadiense acusando a la policía de ese país de haber "asaltado" la residencia de la diplomática, de la que no se reveló su identidad.
Senegal citó al representante canadiense para "denunciar y condenar fuertemente el acto barbárico y racista" en el que la policía ejerció "humillante violencia física y moral frente a testigos".
El gobierno de Quebec, provincia donde ocurrieron los hechos, anunció que la Oficina de Investigaciones Independientes (BEI), organismo de control policial, abrió una investigación tras el reporte de una "intervención policial que plantea interrogantes".
Por su parte, el departamento de policía del suburbio de Gatineau, describió el viernes en la noche un escenario muy diferente, pues dice que la mujer atacó con violencia a dos oficiales.
El altercado se generó por un requerimiento judicial, que no describió, contra la diplomática cuando el agente judicial a cargo de cumplir dicha orden había solicitado ayuda de la policía.
Según los oficiales, la persona se tornó "agresiva" y fue esposada y puesta en la parte de atrás de una patrulla.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Senegal exigió que el incidente sea investigado y se proceda contra "los autores de esta inadmisible agresión".
En un comunicado, Ottawa dijo que "continuará cooperando totalmente con Senegal para remediar esta situación lamentable".
JLMR