Un agente del alguacil de Florida, Estados Unidos, murió tras recibir un disparo de su compañero de cuarto, en una situación que fue considerada por las autoridades locales como "accidente extremadamente tonto y totalmente evitable".
La situación, protagonizada por dos oficiales, fue alertada a las autoridades el sábado por el ayudante del alguacil del condado de Brevard, Andrew Lawson, quien dijo que acababa de dispararle accidentalmente a su compañero de cuarto, según consigna la cadena ABC News.
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La víctima fue el ayudante Austin Walsh, de 23 años, quien murió a causa de la única herida de bala, según informó el alguacil del condado de Brevard, Wayne Ivey.
Según ABC News, el alguacil sostuvo que los dos agentes eran "los mejores amigos". Dijo que Lawson reveló a las autoridades que ambos se tomaron un descanso de un juego en línea.
En el instante en que los dos estaban "parados, hablando", Lawson sostuvo una pistola que "creía que había descargado", agregó el alguacil.
“En un momento de su conversación, Lawson, pensando que el arma estaba descargada, en tono de broma apuntó con el arma en dirección a Austin y apretó el gatillo”, sostuvo Ivey.
Lawson fue detenido el domingo por las autoridades, enfrentando un cargo de homicidio involuntario, según el alguacil. La autoridad local agregó que “no hay excusa para esta muerte trágica y totalmente evitable”.
"Austin era un gran chico (...) Nuestros corazones están rotos", dijo Ivey, revelando que el oficial fallecido, quien desde los 18 años estaba en la institución, "era un apasionado de su trabajo y amaba a su comunidad".
Sostuvo también que el agente "cooperó totalmente" en la investigación, afirmando que actualmente está "angustiado y devastado". El alguacil lo consideró como un"gran niño que lamentablemente tomó una decisión horrible e irresponsable que ha impactado para siempre la vida de tantos".