Un partido de futbol entre el Santa Pola 'A' y el Jove Español 'B' del grupo ocho de la 1ª regional de juveniles en España terminó en tragedia, luego de que el pasado sábado 4 de noviembre Enzo, un joven de 17 años, que jugaba fue agredido por otro jugador.
De acuerdo con el medio de comunicación ABC, al inicio era un partido normal, no obstante, de un momento a otro un joven del equipo contrario, al que pertenecía Enzo, se acercó hasta él para darle un codazo en la nuca.
La madre del joven deportista, Noemí, se llenó de miedo al ver que su hijo se desplomó en el suelo y expresó: "Veía que mi hijo se moría, esa imagen la tengo grabada en mi cabeza, no se me va. No lo estoy pasando nada bien, tampoco mis otras dos hijas".
Por este hecho, la mamá del joven decidió levantar una denuncia contra el agresor de Enzo por un delito de lesiones ante la Guardia Civil.
Noemí aseguró que Enzo, tras ser atendido por especialistas, ya está en su casa, pero no deja de sentirse mareado y el vómito continúa. Las dos hermanas del joven atraviesan por miedo, no quieren salir. Noemí para tratar de remediar la situación llevó a su hija de 13 años al hospital, ya que presenta "ansiedad".
"Ahora mismo me pillas yendo a urgencias con mi hija de 13 años porque tiene mucha ansiedad. No se le va de la cabeza la imagen de su hermano tendido sobre en el campo", relató la mujer a ABC.
Una de las hermanas del joven de 17 años se acercó hasta él para expresarle: "Hermanito, ya no quiero que juegues más al fútbol, dile a tus compañeros que no te hagan daño. Estabas muerto en el suelo".
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ABC comunicó que tras el ataque del menor las actividades fueron suspendidas. Añadió que el club visitante mandó un escrito a la federación en donde se habló del tema.
"Enzo recibió una brutal agresión del jugador del Santa Pola S. C. C. por la espalda y de manera brutal, pegándole un codazo de arriba a abajo a nuestro jugador, que cayó desplomado al suelo y tuvo que salir del campo en ambulancia estando inconsciente".
Sergio Ruiz, una de las personas que atendió a Enzo tras ser atacado, aseguró que el joven que lo agredió "lejos de arrepentirse" se burló de la situación.
"En vez de venir a ver al chaval se puso a dos metros de mi y, tocándose los genitales, me empezó a mandar besos diciéndome 'maricón he sido yo'".
La mamá de Enzo continua asustada; solicitó que este tipo de incidentes no vuelvan a repetirse en un campo de fútbol, ya que la seguridad de los jóvenes puede correr peligro.
APC