La exhibición de la Alfombra de flores de Bruselas (Tapis de Fleurs de Bruxelles, por su nombre en francés) se celebra cada dos años desde 1971. Para este 2024 la exposición se realizó con flores autóctonas de Bélgica.
Las dimensiones de la alfombra son de 70 metros de largo por 24 metros de ancho, esta se puede apreciar a lo largo de la Grand-Place, la plaza central de Bruselas reconocida por su riqueza ornamental que ha sido reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde el año 2 mil.
Océane Cornille, quien responde al seudónimo de Whoups, es una artista callejera de Lieja, Bélgica, responsable del diseño de este año.
“Solo quería ilustrar la diversidad de Bruselas, la idea en la que todos los barrios se comunican entre sí con su propia identidad, historia o lenguaje, y sus diferencias, que hacen de Bruselas una gran ciudad única", dijo Cornille a Reuters.
Ofrece un diseño que va más allá de lo que se ha presentados en ediciones pasadas, con el fin de atraer nuevo público. “Es un guiño a Bruselas, al Art Nouveau y al surrealismo” según lo comenta la organización responsable del evento.
La organización responsable
Tapis de Fleurs de Bruxelles es la organización que se encarga de las ediciones en dicho recinto cada dos años y de realizar exposiciones en el Ayuntamiento llamadas Flowertime, también forma parte de la Asociación Internacional de Artes Efímeras.
Fue creada en 1986 con el objetivo de “promover el arte floral en Bruselas y en toda Bélgica a través de la colaboración con varias asociaciones”. Además de dar apoyo a los artistas de Bélgica, tanto para el diseño de las alfombras florales, como para los arreglos que se exhiben en las ediciones de Flowertime.
Las flores que principalmente se utilizan en estas exhibiciones son begonias y dalias, no obstante, también favorecen a los productores florales belgas por sus conocimientos en el área.
La primera alfombra de flores
Etienne Stautemas, quien tenía conocimientos de horticultura comenzó a realizar alfombras de flores a principios de los años 50, eran pequeñas y hechas de begonias mayoritariamente.
Con el paso de los años el equipo del artista en conjunto con el diseñador Mark Schautteet se han consolidado como especialistas en la creación de alfombras de flores enormes en lugares como París, Londres, Ámsterdam, Viena, Valencia, Buenos Aires y Ohio.
Un largo proceso
Profesionales como ilustradores, diseñadores gráficos y paisajistas se encargan de trabajar en los proyectos a escala de cada edición, para logar que mil 680 metros cuadrados de begonias, dalias, hierbas y cortezas sean las que se adornan la plaza.
Los temas son diferentes en cada ocasión, más de 100 jardineros y voluntarios se reúnen para formar el diseño gigante en más o menos 6 horas de trabajo, mismo que se mantiene en la Grand-Place durante cuatro a cinco días para que las personas puedan apreciarlo en su totalidad.
YRH