Nicolás Chocobar es un apasionado de la geografía desde que tiene memoria, y pese a que esto lo llevó a conocer nueve idiomas (o 10 si se cuenta el esperanto) todavía no está satisfecho.
El hombre de 34 años, residente de la provincia argentina Tucumán, reveló su método para dominar una nueva lengua incluso de forma autodidacta.
De hecho, su acercamiento con el francés, ruso, georgiano y turco fue de esta manera aunque reconoce que no los domina al cien por ciento. Pero entre los idiomas que sí conoce en su totalidad están el inglés, francés, portugués, italiano y alemán.
En total son 9 lenguas reconocidas oficialmente que el joven conoce, pero si se cuenta el esperanto (propuesta como un idioma universal) la lista asciende a 10.
Nicolás utiliza sus conocimientos lingüísticos para la escritura, y tiene un libro académico publicado, en el que plantea una teoría semiótica objetiva (en contraste con la subjetiva que domina en las universidades).
Pese a su vasto conocimiento, el joven se dice escéptico frente a las personas que aseguran dominar 20 idiomas porque para ello se necesita viajar y tener mucha interacción social.
En este sentido, el método de Nicolás para aprender un nuevo idioma (su pasatiempo favorito) es programar a su cerebro para vivir y resolver situaciones cotidianas en esa lengua.
De esa forma la mente se adapta para comprender las reglas para comunicarse, y así los conocimientos académicos como la gramática u ortografía pasan a segundo plano, lo que facilita el aprendizaje.
Aunado a lo anterior, practicar el idioma es imprescindible para mantenerlo en la memoria, porque de otro modo lo aprendido se olvida.
"(Hay que) hacerle ver al cerebro que sí o sí tiene que usar ese idioma para resolver situaciones cotidianas", explicó Chocobar a El Clarín.
En resumen, la retroalimentación es la fuente principal para aprender un nuevo idioma, porque así se tiene
información de entrada y de salida, contrario a cuando se lee un libro o se ve una película pues así sólo hay información de entrada.
SNGZ