Luego de que los talibanes tomaron Afganistán, cientos de familias decidieron abandonar el país; el extremismo y el riesgo que corren los ciudadanos que trabajaron con el gobierno de Estados Unidos y sus aliados son una bomba de tiempo, pero el destino para quienes lograron salir es distinto... es un nuevo comienzo.
Además del totalitarismo, la crisis económica a la que se enfrentará el nuevo régimen es un motor que empuja a las personas a juntarse en el aeropuerto de Kabul y buscar los últimos vuelos, antes del 31 de agosto, fecha límite para la partida de las Fuerzas Armadas estadunidenses.
Sin embargo, la búsqueda de una nueva vida no es algo nuevo. Al menos 2.6 millones de personas refugiadas en el mundo provienen de Afganistán, de acuerdo con el informe de Tendencias Globales sobre el desplazamiento forzado de la ONU, publicado el 18 de junio de 2021.
Afganistán es el tercer país de donde provienen más refugiados, sólo superado por Siria y Venezuela.
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Canadá fue el primer país en ofrecer ayuda a los ciudadanos afganos, incluso antes de la caída de Kabul; está dispuesto a aceptar a 20 mil refugiados que están intentando abandonar el país, o ya lo han hecho.
La Unión Europea ha llamado a los países a aceptar a los refugiados afganos. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo el 21 de agosto que los estados miembros del bloque tendrán el apoyo financiero.
Las evacuaciones del aeropuerto de Kabul se reanudaron después de los devastadores ataques con bombas que dejaron decenas de muertos afganos y estadunidenses.
Según rescate.org, unos 263 mil civiles afganos han colaborado en las operaciones militares estadunidenses en Afganistán desde que comenzó el conflicto en 2001.
De acuerdo con un reporte de Bloomberg News, la administración de Joe Biden ha pedido a organizaciones que ayudan a refugiados prepararse para recibir y reubicar a 50 mil afganos evacuados bajo un programa provisional.
El permiso humanitario es una figura que se usa en ocasiones raras y se otorga a las personas en situaciones de urgencia para permanecer en Estados Unidos un año para completar su solicitud a programas más formales de asilo, refugio o estatus especiales (TPS).
En el país, además de las mujeres, los menores de edad constituyen el grupo más vulnerable de la población. Según el ACNUR, 80 por ciento de los cerca de 250 mil afganos que se habían visto obligados a huir desde finales de mayo y hasta el 13 de agosto, son mujeres y niños.
Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores (SRE), informó que la embajada mexicana en Irán ha comenzado a procesar solicitudes de refugio de personas afganas.
Entre las primeras personas afganas en recibir refugio en México fueron un equipo de mujeres de robótica, algunas de sus compañeras huyeron a Catar. Otras siguen en Afganistán, donde la educación de las niñas fue prohibida durante el último gobierno de los talibanes.
DMZ