La torrenciales lluvias en Corea del Sur de una inusual temporada de precipitaciones ha dejado 42 muertos y desaparecidos, así como a 7 mil personas desplazadas en el país; mientras que la isla de Jeju y el sur de la península se prepara para llegada del tifón Jangmi.
La última región en ser duramente golpeada por las precipitaciones ha sido la provincia de Jeolla del Sur, al suroeste del país, donde las tormentas que han afectado a la zona desde el viernes han dejado de momento 13 fallecidos y 2 desaparecidos. Las lluvias han roto diques en torno al río Seomjin, anegando más de 2 mil 500 hogares y cortando carreteras y vías férreas.
Desde que la temporada de lluvias, que comenzó a finales de junio, más de 14 mil edificios en todo el país han sufrido daños importantes y más de 7 mil personas no pueden regresar a sus casas. La de este año va camino de ser la temporada lluviosa estival más larga desde que hay registros.
En 2013, año récord, las lluvias se prolongaron durante 49 días. La Administración Meteorológica de Corea (KMA) estima que la actual, que dura ya 47 días, superará los 50, ya que los pronósticos apuntan a que seguirá lloviendo en la mayor parte del país al menos hasta el 15 de agosto.
La KMA ha pronosticado también la llegada del tifón Jangmi para hoy. Está previsto que la tormenta toque tierra hacia las 15:00 horas locales en las cercanías de la ciudad de Busan, la segunda ciudad del país que ya sufrió inundaciones hace algo más de dos semanas.
No obstante, se trata de un tifón de baja intensidad que se desplaza con una velocidad en torno a 70 kilómetros por hora, según la KMA, por lo que se prevé que abandone la península coreana hacia las 18:00 horas locales y siga desplazándose en dirección noreste por el Mar de Japón hasta perder fuerza.
dmr