La beluga que se extravió en el río Sena, ubicada a 70 kilómetros de París, rechazó los alimentos y ahora recibirá vitaminas para que recupere el apetito, anunció la prefectura del Eure en Normandía.
"Las vitaminas serán administradas por un veterinario mediante una flecha", indicó Isabelle Dorliat Pouzet, secretaria general de la prefectura de Eure, en rueda de prensa.
La beluga, un cetáceo de cuatro metros, cuya presencia en el Sena es excepcional. Ambientalistas franceses han trabajado sin cesar para alimentar a la beluga, pues aseguraron está peligrosamente enflaquecida.
"Está bastante demacrada y parece tener dificultades de alimentación", destacó Pouzet. "Nuestros equipos tomaron turnos con la beluga toda la noche. Siempre ignora el pescado que le ofrecemos", tuiteó el grupo de conservación marina Sea Shepherd Francia.
Los intentos de alimentarla, con arenques muertos y truchas vivas, no parecen haber tenido éxito.
Los conservacionistas han estado tratando desde ayer alimentar al cetáceo. Diciendo que es “una carrera contra el reloj”, Sea Shepherd teme que la beluga se esté debilitando lentamente y que pueda morir.
Entre las prescripciones para evitar que el cetáceo fallezca, figuran la reapertura de una esclusa hacia el mar, a 160 kilómetros, para que pueda reanudar su camino o conservarlo en la cuenca "para que recupere el apetito".
Cualquier decisión se realizará pensando en el interés del animal y se esperan análisis para comenzar con los planes de acción, indicó la funcionaria.
Al animal le aparecieron "pequeñas manchas" que pueden ser naturales debido al agua dulce, pero que también pueden implicar que sufra otros problemas, según la misma fuente.
La beluga, que realizaba el sábado idas y vueltas en la cuenca "tranquilamente", fue detectada el 2 de agosto en el Sena.
En mayo, una orca se encontró en dificultades en mismo río, entre Ruan y Le Havre. Las operaciones para tratar de salvarla fracasaron y el animal murió de hambre.
Dorliat Pouzet afirmó que la situación entre la orca y la beluga es "muy diferente", ya que la ballena "estaba más debilitada y había desaparecido del radar durante algún tiempo".
Son "dos animales diferentes, la orca soporta menos el agua dulce que la beluga", explicó.
Según el observatorio Pelagis, especialista en mamíferos marinos, se trata de la segunda beluga registrada en Francia después de que un pescador del estuario del Loira sacara uno en sus redes en 1948.
La beluga es una especie protegida de cetáceos que viven habitualmente en aguas frías.
ROA