El jefe de la junta militar de Birmania redujo la pena de prisión de la líder derrocada de ese país y también Premio Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi a dos años, en lugar de cuatro, informaron hoy los medios de comunicación estatales de la nación que en febrero de este año sufrió un golpe militar.
El jefe de la junta, Min Aung Hlaing, "perdonó a dos años" en lugar de cuatro a Suu Kyi y al ex presidente Win Myint sus condenas por incitación contra los militares y por incumplir las normas sobre el coronavirus, dijo la televisión estatal.
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Aún con la reducción de la sentencia, Estados Unidos y la Organización de las Naciones Unidas (ONU) han liderado los llamados a pedir al régimen militar que libere a Suu Kyi y los demás opositores, quienes estaban en el poder antes de que ocurriera el golpe de Estado provocado por el Ejército tras cuestionar el resultado de elecciones locales.
Estados Unidos calificó hoy como "afrentas a la democracia y la justicia" la sentencia a prisión de la derrocada líder birmana y la represión de otros opositores electos.
"Demandamos al régimen liberar a Aung San Suu Kyi y todos los demás detenidos injustamente, incluyendo funcionarios electos democráticamente", dijo el secretario de Estado Antony Blinken en un comunicado.
La Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, ha recibido información del arresto arbitrario en Birmania de al menos 10 mil personas que son consideradas opositoras y de la muerte de 175 de ellas en custodia, muy probablemente por torturas y entre las cuales se encontraban numerosos miembros de la LND.
Bachelet consideró que la condena de Suu Kyi ha sido producto de "un juicio falso realizado en secreto ante un tribunal controlado por los militares, lo que hace obvia su motivación política".
Agregó que con esta acción no sólo se niega de forma arbitraria la libertad de la líder birmana, sino que también se cierran las puertas a cualquier diálogo político y se muestra claramente la intención de la jerarquía militar de eliminar a toda la oposición.
"Este veredicto contra Aung San Suu Kyi no hará sino profundizar el rechazo al golpe y endurecerá las posiciones, cuando lo que se necesita es un diálogo y una solución pacífica y política a esta crisis", dijo Bachelet en un comunicado.
La alta comisionada también condenó el ataque "despiadado" registrado este fin de semana en la ciudad de Yangon, donde las fuerzas de seguridad utilizaron un camión para embestir a manifestantes desarmados y luego dispararon contra ellos.
Aung San Suu Kyi, de 76 años, fue condenada este lunes a dos años de prisión -después de recibir una pena inicial de cuatro años- por incitar al desorden público e incumplir las restricciones del covid-19.
Esta sentencia es la primera de una serie de procesos que la exponen a décadas de cárcel. La líder está detenida desde el 1 de febrero cuando los militares la derrocaron de la presidencia y pusieron fin a un breve periodo democrático.
OMZI