El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, justificó este jueves la decisión de rechazar ayuda ofrecida por Argentina para combatir las devastadoras inundaciones en el estado de Bahia (nordeste) con el argumento de que el envío de diez hombres "no sería de mucha ayuda" e incluso podría "dificultar" las tareas.
"Le agradezco al [presidente] Alberto Fernández por la oferta, pero diez personas no nos iban a ser de mucha ayuda, tal vez hasta dificultarían un poco" las tareas que ya están desempeñando diversas instituciones brasileñas como las Fuerzas Armadas o los bomberos, afirmó Bolsonaro el jueves en su transmisión semanal por redes sociales.
"Nos traería una gran dificultad porque sería un grupo al que hay que tratar con todo cariño, darle alojamiento especial, transporte, etc... Y ya tenemos en Brasil personas para ese tipo de misión", dijo el mandatario brasileño, que ya había agradecido más temprano por Twitter "el fraternal ofrecimiento argentino".
El lunes, el embajador argentino en Brasilia, Daniel Scioli, ofreció la ayuda de su gobierno a Brasil para combatir los dramáticos efectos de las inundaciones causadas por las fuertes lluvias de los últimos días, que dejaron por ahora 25 muertos, 90 mil desplazados y un reguero de destrucción en varios municipios de la región sur de Bahia.
"Pusimos a disposición del Gobierno Federal y del gobernador del estado de Bahia desinfectantes y potabilizadores de agua, así como también profesionales especializados en su utilización, en el armado de refugios de ACNUR, en logística de donaciones y en contención psicosocial", escribió.
Bolsonaro, que mantiene una tensa relación con el gobierno del centroizquierdista Fernández, dijo este jueves en Twitter que la ayuda ofrecida por Argentina "era innecesaria en ese momento, pero podrá ser activada oportunamente".
También reiteró que su gobierno "está abierto a ayuda y donaciones internacionales" e informó de que la cancillería aceptó donaciones de tiendas de campaña, colchones y mantas de la Agencia de cooperación internacional japonesa (JICA), entre otros organismos.
El dirigente argentino Alberto Fernández es un aliado del expresidente izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), probable rival del mandatario brasileño en las elecciones del año que viene y al que los sondeos le atribuyen una holgada victoria.
"Es lamentable ver a un presidente que no ayuda rechazar la ayuda de otras personas", lamentó Lula también en Twitter.
Aunque envió varios ministros y liberó recursos para la reconstrucción de carreteras en la región, Bolsonaro, enfrenta duras críticas desde hace varios días por continuar de vacaciones junto a su familia en el sur de Brasil y no acudir personalmente a la zona de desastre, que sobrevoló puntualmente el 12 de diciembre.
RM