El viernes, Israel bombardeó el cuartel general de Hezbolá al sur de Beirut, situación que dejó 2 muertos y 76 personas herdias, que la televisión israelí aseguró que se proponía matar al jefe del movimiento islamista, Hasán Nasralá.
El bombardeo se llevó a cabo poco después de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmara ante la ONU que los bombardeos en Líbano continuarían hasta que se alcancen todos sus objetivos.
El bombardeo dejó dos muertos y 76 heridos, según un primer balance del Ministerio de Salud libanés.
El ejército israelí indicó que había llevado a cabo un bombardeo de precisión contra el cuartel general de la organización terrorista Hezbolá en Dahiyeh.
Respuesta de Hezbolá
El líder de Hezbolá, Hasan Nasralá, objetivo de este ataque según varias televisiones israelíes, está bien, aseguró a AFP una fuente cercana al movimiento islamista.
Hezbolá afirmó por la noche que, como respuesta, lanzó una andanada de cohetes contra la localidad de Safed, en el norte de Israel, uno de los cuales impactó en una casa, según el ejército.
Por la tarde había reivindicado disparos de cohetes contra la ciudad portuaria de Haifa, que alberga numerosas industrias de defensa.
El ejército israelí instó por su lado a los habitantes a evacuar varias áreas de la periferia sur de Beirut, en previsión de nuevas operaciones militares.
Cráteres tras bombardeos
En el lugar de los bombardeos, en Haret Hreik, quedaron seis enormes cráteres de varios metros de profundidad, toneladas de escombros y una espesa polvareda gris. Según la fuente cercana a Hezbolá, seis edificios de este suburbio densamente poblado fueron se derrumbaron.
Un fotógrafo de AFP reportó escenas de pánico entre los habitantes, que huían de la zona.
"Estaba en casa ¡Dios mío, qué explosión! creí que el edificio se me caía encima (…). No tengo palabras para describirlo", exclama Abir Hammoud, una profesora de unos 40 años que vive en la zona.
El primer ministro libanés, Najib Mikati, denunció una «guerra genocida» contra su país.
La oficina de Netanyahuh difundió una foto en la que se le ve al teléfono dando, según el pie de foto, luz verde al bombardeo.
"Mientras Hezbolá elija el camino de la guerra, Israel no tiene otra opción", afirmó el mandatario ante la Asamblea General de la ONU, en Nueva York, boicoteado por varias delegaciones.
Desde lunes, más de 700 personas, en su mayoría civiles, han muerto en Líbano por los bombardeos israelíes, según el Ministerio de Salud libanés.
Hezbolá ya advirtió que continuará sus ataques "hasta el final de la agresión en Gaza".
Conflicto entre Israel y Hamás
El conflicto entre Israel y Hamás estalló tras el ataque de milicianos islamistas del 7 de octubre, que dejó mil 205 muertos en Israel, en su mayoría civiles, según un recuento de la AFP basado en cifras oficiales israelíes que incluye a los rehenes que murieron o fueron asesinados en cautiverio en Gaza.
De las 251 personas secuestradas, 97 siguen en Gaza, 33 de las cuales han sido declaradas muertas por el ejército.
En represalia, Israel lanzó una ofensiva en la Franja de Gaza que ha dejado hasta el momento 41 mil 534 muertos, la mayoría civiles, según datos del Ministerio de Salud del gobierno de Hamás, considerados fiables por la ONU.
- Te recomendamos Presidente palestino Abbas pide detener la guerra en Gaza frente a la ONU Internacional
HCM