Río de Janeiro cuenta con un clima tropical húmedo, por lo que las temperaturas suelen ser altas, la humedad es constante y las lluvias recorren la ciudad como una leve brisa en los calurosos días de verano.
Las olas de calor envuelven en un sofocante abrazo a los habitantes de la ciudad, quienes deben enfrentarse a temperaturas de hasta 35 °C que, lamentablemente, no dan descanso ni siquiera al anochecer, pues el calor llega a los 30 °C, lo que no permite un buen descanso.
Es por ello que los cariocas, como se les llama a los habitantes de Río, han optado por una solución práctica y divertida para acabar con el calor nocturno: sumergirse en las frescas olas de playas como Copacabana e Ipanema.
¿Los cariocas nadan de noche por el calor?
Los ventiladores no son suficiente para ganar la pelea contra el clima y los aires acondicionados no son una opción para todo el mundo, por lo que los cariocas han dado con una creativa solución: refrescarse en el mar.
Una práctica que se ha llevado a cabo durante varios años es que los habitantes aprovechen las costas para combatir el calor, por lo que disfrutan del agua salada bajo las estrellas. Con el fin de hacerlo una experiencia más segura, suelen hacerlo en grupos o en espacios con gran concentración.
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A pesar de ello, los peligros no desaparecen, pues el mar de por si ya es terreno desconocido, de noche se vuelve más intimidante, con las mareas altas y las corrientes fuertes, los cariocas deben estar atentos para no arriesgar sus vidas.
Es por ello que también trabajan algunos salva vidas nocturnos, con el fin de que todos puedan tener una experiencia más segura. Sin duda el calor extremo es un enemigo formidable, pero en Río han sabido como sobrellevarlo e incluso sacar provecho.
Así se viven las noches en Río de Janeiro
LH