En China, habitantes se refugian de la ola de calor en estaciones subterráneas

Cientos de pobladores acuden a estaciones subterráneas para huir de la ola de calor que azota al país.

En China, habitantes se refugian de calor. | AFP
AFP
Chongqing, China /

En estaciones subterráneas caóticas y congestionadas, habitantes de la megaciudad china de Chongqing se refugian del verano más caluroso que se tiene en registro, donde el aire acondicionado les permite evadir las temperaturas abrasadoras del exterior.

Varias provincias chinas están asfixiadas por la ola de calor que ha provocado cortes de electricidad, lo cual obligó a cerrar fábricas y bajar las luces en algunas de las calles más conocidas del país.

Los expertos señalan que la intensidad, la extensión y la duración de esta ola de calor pueden convertirla en una de las peores del mundo.

En Chongqing, de 30 millones de habitantes, el río Jialing, afluente del Yangtze, está seco y la paciencia se agota.

Desesperados por escapar al calor, cientos de pobladores de mediana edad o ancianos acuden a las profundidades de las estaciones subterráneas, donde pasan las horas fumando, jugando cartas o durmiendo.

Habitantes de la ciudad de Chongqing se refugian del verano más caluroso | AFP

Tendidos en sillas o sobre cobertores, en la estación hay barrenderos en su hora de descanso, trabajadores manuales, desempleados o personas que viven en la cercanía.

Pese a un reciente brote de covid-19 en la ciudad, donde 10 millones de personas debieron hacer pruebas obligatorias, no se ven muchas mascarillas.

En un supermercado cercano, un gerente comentó a AFP que muchos de los que pasan el tiempo en la estación subterránea tienen aire acondicionado en casa pero se aburren y buscan para el tiempo con sus amigos.

Pero los transeúntes no se impresionan con su presencia y caminan entre la multitud, un recordatorio de que los negocios en la ciudad continúan pese al sofocante calor en las calles arriba.

LCR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.