Doce personas murieron después de que la tormenta tropical Michaung llegó el martes a la costa sureste de la India, donde provocó lluvias torrenciales y fuertes vientos, según las autoridades.
El ciclón cruzó la línea costera del estado de Andhra Pradesh con vientos sostenidos máximos de entre 90 y 100 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 110 km/h, indicó el Centro de Alerta de Ciclones.
Otro estado en el sur, Tamil Nadu, registró varios días de lluvias intensas antes de que llegara la tormenta. Los chaparrones provocaron accidentes en los que murieron al menos ocho personas en cuatro distritos vulnerables en los últimos días, según C. Muthukumaran, funcionario de manejo de desastres en el estado.
En la capital, Chennai, la lluvia de las franjas exteriores del ciclón provocó colapsos de muros, arrancó árboles y anegó carreteras donde el agua llegaba a las rodillas.
Videos difundidos el lunes mostraban agua fluyendo a las pistas del aeropuerto local, y las autoridades se vieron obligadas a cerrarlo y cancelar vuelos. Los chaparrones habían empezado a remitir después, lo que permitió reabrir el aeropuerto y reanudar los servicios, aunque muchas partes de la ciudad seguían inundadas el martes.
La lluvia también castigó zonas del estado oriental de Odisha, aunque no había reportes inmediatos de muertos o daños graves.
En Andhra Pradesh, donde comenzó a tocar tierra la tormenta cerca del distrito de Ongole, las autoridades cerraron escuelas y evacuaron a más de 9 mil personas de zonas bajas y costeras. No se reportaron muertes.
Mientras tanto, en Tamil Nadu, se habilitaron miles de campamentos para desplazados en zonas costeras mientras equipos de la Fuerza Nacional de Respuesta a Desastres y otras agencias enviaban rescatistas en barco para evacuar a cientos de personas varadas en carreteras y casas que se habían llenado de agua. Se declaró un día no laborable en distritos afectados por la tormenta y se instó a los vecinos a quedarse en casa.
Los ciclones no son inauditos en las costas indias, pero los cambios en los patrones climáticos los han hecho más intensos, lo que añade urgencia a los preparativos para desastres naturales.
SNGZ