La pequeña ciudad de Encantado, en el sur de Brasil, ha construido un Cristo más alto que el que está en Río de Janeiro para atraer al turismo.
El Cristo Protector de Encantado tiene 43 metros de altura, frente a la estatua de Río, que mide 38 metros, incluyendo en ambos casos sus pedestales.
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Construida con hormigón sobre una estructura metálica, ya ha sido erigida en una colina sobre la ciudad, pero el lugar sólo se abrirá al público en algún momento del próximo año, dijo Robison Gonzatti, vicepresidente de la asociación que patrocinó la estatua.
"Es el Cristo más grande del mundo", dijo a Reuters.
La estatua tiene un punto de observación para los visitantes que pueden mirar a través de una gran ventana en forma de corazón.
La vista tendrá que competir con la espectacular visión que los turistas tienen de la Bahía de Guanabara desde el Cristo que se alza en la cima del Corcovado de Río.
La estatua Art Deco de Río se construyó con hormigón armado y piedra de jabón y tardó nueve años en completarse en 1931, convirtiéndose en un icono de Río de Janeiro y en una de las maravillas del mundo.