La ex mandataria y actual vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, está acusada por asociación ilícita y administración fraudulenta agravada por un caso de fondos para obras viales en la provincia de Santa Cruz, entre 2003 y 2015.
Esta provincia está ubicada en la Patagonia, en el sur argentino, y es el bastión político de Cristina y durante décadas de su marido Néstor Kirchner, presidente entre 2003 y 2007, fallecido en 2010.
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En concreto, se le acusa a la actual presidenta del Senado argentino de favorecer al empresario Lázaro Báez con 51 licitaciones públicas en esa provincia.
Báez sería muy cercano en amistad con la propia Cristina y en vida con Néstor y con el que fuera secretario de Obras Públicas, José López, durante las presidencias del matrimonio Kirchner.
Néstor Kirchner fue gobernador de Santa cruz durante casi 12 años.
Según la fiscalía, la empresa que encabezaba Báez fue una estructura creada para extraer fondos del Estado mediante el direccionamiento de licitaciones y cuando concluyó el mandato de Fernández de Kirchner, desapareció.
Posible condena
Por eso, el fiscal federal Diego Luciani pidió este lunes 12 años de cárcel contra la ex mandataria, que gobernó durante dos periodos consecutivos, 2007-2015, al señalarla como líder de una “asociación ilícita” que favoreció con obras viales a Báez.
Luciani también incluyó en ese supuesto sistema de corrupción a Néstor Kirchner, aunque debido a su fallecimiento, no va más allá la acusación en su caso.
Fernández de Kirchner es la principal imputada en el juicio que comenzó en 2019 y en el que están acusadas otras 12 personas, entre ellas varios exfuncionarios.
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El fiscal pidió el decomiso de bienes involucrados en los delitos por un total de casi mil millones de dólares y la inhabilitación perpetua de Fernández de Kirchner para ocupar cargos públicos.
Muchos expertos sospechan que los capitales supuestamente desviados habrían vuelto a manos de la familia Kirchner a través de las empresas de Báez.
¿Qué dice Cristina Fernández de Kirchner?
La vicepresidenta de Argentina niega las acusaciones y sostiene que la investigación que derivó en este proceso es una persecución política en su contra para inhabilitarla en futuros puestos públicos.
La dirigente peronista, en su corriente de izquierda, indicó que el tribunal ya tiene decidida su condena en el marco de la persecución que viene sufriendo por parte de sectores de la justicia desde el gobierno de su sucesor de corte conservador, Mauricio Macri (2015-2019), quien hoy es uno de los referentes de la oposición.
Tras el gobierno de Macri, actualmente Argentina es gobernada de nuevo por el peronismo a través del presidente Alberto Fernández y como vicepresidenta, Cristina Kirchner.
Este es el primer pedido de una condena para la expresidenta en una docena de causas judiciales por diversos delitos, algunas de las cuales fueron cerradas y otras continúan bajo investigación.
¿Qué sigue para Cristina Fernández de Kirchner?
A partir del 5 de septiembre próximo, las defensas de los acusados responderán a las imputaciones. Se contempla que el veredicto se de a finales de año.
Sin embargo, en caso de ser condenada, Fernández de Kirchner puede apelar la sentencia ante distintas instancias judiciales en un proceso que puede estirarse por años.
La ley no le impide presentarse a cargos públicos en las elecciones generales de 2023, incluyendo de nuevo la presidencia del país, hasta tanto la Corte Suprema de Justicia argentina no se pronuncie de manera definitiva.
Actualmente, por ser vicepresidenta del país y presidir el Senado, tiene inmunidad.
OMZI