Un séptimo cadáver fue hallado en el noroeste de España después de que un autobús de pasajeros se precipitara desde un puente a un río desbordado, lo que eleva el balance final del accidente a siete muertos y dos heridos, según informaron autoridades regionales.
El accidente ocurrió el sábado a pocas horas de la media noche en el municipio de Cerdedo-Cotobade, situado en Galicia, cerca de la frontera con Portugal, en vísperas de la Navidad.
Los restos mortales fueron recuperados río abajo tras ser localizados por un helicóptero de rescate, según informó a la prensa el delegado del gobierno español en Galicia, José Miñones.
Hoy se reanudaron las labores de búsqueda y rescate tras la denuncia de desaparición presentada por el hijo de la víctima dos días después del accidente.
Las dos primeras víctimas fueron halladas en la noche del sábado al domingo cerca del lugar donde cayó del autobús, junto con otras dos personas rescatadas vivas, entre ellas, el conductor del vehículo, que fueron hospitalizadas.
Los otros dos cuerpos fueron encontrados la mañana del domingo por los equipos de emergencia. Uno de ellos pudo ser localizado por los socorristas, mientras que el segundo, hallado sin vida, aún no pudo ser recuperado al mediodía, indicó un portavoz de la Guardia Civil.
El vocero informó que una o dos personas seguían desaparecidas, pero posteriormente fueron localizados sin vida.
El conductor tenía sobre el número de personas que se encontraban en el autobús en el momento del accidente, precisó a la AFP.
Las autoridades informaron de que los primeros cuatro fallecidos eran una joven de nacionalidad peruana, que cuidaba de un anciano en Galicia, y las otras tenían la nacionalidad española, residentes de la región.
Del accidente resultaron dos supervivientes -el conductor del vehículo, de 63 años, y una pasajera- fueron sacados del río Lérez por los bomberos con cuerdas y trasladados a hospitales cercanos con heridas de diversa consideración.
El conductor dio negativo en las pruebas de alcoholemia y drogas, dijo a Reuters un portavoz de la policía.
Desnivel grande
Según los equipos de rescate, que publicaron en Twitter una foto del autobús sumergido en el fondo de un barranco en un río tumultuoso entre troncos de los árboles, el incidente se produjo en un lugar de difícil acceso, lo que está complicando las tareas de salvamento.
Bajo el puente hay "un desnivel bastante grande" de "treinta metros", confirmó el portavoz de la Guardia Civil. En un comunicado, los rescatistas mencionaron que incluso alcanzaba los 75 metros.
Un automovilista dio la señal de alarma tras comprobar que la barrera de seguridad estaba destruida en el puente donde tuvo lugar el accidente. El servicio de emergencia recibió una llamada desde el interior del autobús, lo que les permitió localizar el vehículo en el fondo del río Lérez.
Debido a las "condiciones meteorológicas desfavorables", marcadas por las fuertes lluvias que aumentaron repentinamente el caudal de agua, la búsqueda tuvo que suspenderse de manera temporal durante la noche, precisaron los servicios de emergencia en un comunicado.
Las labores de rescate retomaron este domingo al amanecer, con importantes refuerzos, señaló el vocero de la Guardia Civil. Entre ellos, hay unidades de rescate de montaña, espeleólogos y buzos.
Una investigación se ha abierto para determinar las causas del accidente, todavía desconocidas. Según el portavoz, el conductor del autobús tiene experiencia al volante y, además, dio negativo en el control de alcoholemia y drogas.
Según el diario regional La Voz de Galicia, entre los pasajeros del autobús había personas que visitaban a familiares detenidos en el centro penitenciario de Monterroso, ubicado en el centro de Galicia, con motivo de la Nochebuena.
En Twitter, el presidente de la comunidad de Galicia, Alfonso Rueda, del Partido Popular (de derecha), expresó sus "condolencias a las familias de los fallecidos" y agradeció a los equipos de rescate su "difícil trabajo".
MRA