El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, llamó hoy a los habitantes de la isla a mantener la unidad ante “la racha de eventos negativos” que padece el país con apagones y desabastecimiento de alimentos y medicinas, al hablar en el acto central por el aniversario 69 del inicio de la revolución.
“Nada es peor que la racha de eventos negativos que venimos padeciendo (…) pero hasta un anexionista comprende que la causa principal es el bloqueo de Estados Unidos y que la solución no la tienen quienes lo han creado”, dijo el mandatario en un discurso en la sureña ciudad de Cienfuegos, que fue transmitido en vivo por la televisión a todo el país.
La única razón para ese ensañamiento, “es que los pueblos se inspiren en el socialismo cubano, porque entonces serían demasiado subversivos para el actual orden mundial “, expresó el gobernante antes de proclamar: “¡Quítennos ese pretexto!”.
En la ceremonia, replicada días antes en las restantes 14 provincias cubanas, se encontraban el ex mandatario Raúl Castro, de 91 años, y el viceministro Ramiro Valdés, 90 años, sobrevivientes al asalto a tiros en 1953 al cuartel Moncada, en la oriental ciudad de Santiago de Cuba, acontecimiento considerado como el inicio de la revolución que comandó Fidel Castro.
“El socialismo no puede ser difamado en nombre de la democracia y la libertad mientras se le cierren todas las puertas para el comercio internacional”, dijo Díaz-Canel en un discurso leído de poco menos de 30 minutos, en el que agradeció además la solidaridad internacional recibida por el país en “las duras circunstancias del último año”.
En ese sentido recordó el apoyo recibido de los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Vietnam, Italia y Rusia, y destacó en especial al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador “quien ha sido reiterativo en su solidaridad en todas sus mañaneras”, dijo.
En el acto se encontraban también más de un centenar de representantes de organizaciones sociales y religiosas de Puerto Rico y Estados Unidos, incluidos miembros del denominado “Partido Socialismo y Revolución”, quienes antes de la ceremonia se reunieron con Díaz-Canel.
La racha negativa
El nuevo aniversario del inicio de la revolución cubana se cumplió en un contexto sumamente complejo, signado al exterior por el incremento de precios de alimentos y materias primas a causa del conflicto en Ucrania y marcado al interior del país por falta de moneda fuerte en medio de una crisis económica sin salida a la vista que el gobierno busca sobrepasar con medidas de emergencia.
De ahí el adelanto de Díaz-Canel de que en las próximas semanas se anunciarán los detalles de un nuevo paquete de medidas económicas que incluyen establecer por primera vez en medio siglo “un marco regulatorio para la inversión extranjera” en el sector privado y establecer un nuevo mercado cambiario de monedas fuertes.
Hasta ahora, el precio de cambio estático y oficial es de 24 pesos cubanos por un dólar estadunidense, mientras en el predominante mercado negro el cambio fluctúa entre 105 y 110 pesos por dólar.
Especialistas especulan que el punto de arrancada del nuevo mercado cambiario fijaría la transacción en 80 pesos por dólares.
Las nuevas disposiciones fueron anunciadas hace pocos días en el parlamento unicameral y levantaron el ánimo en ciertos sectores y otros mantuvieron su escepticismo, en tanto especialistas han sido cautos en pronunciarse a la espera de conocer su implementación.
En este panorama plagado de contradicciones y desesperanzas el presidente Díaz-Canel terminó su discurso en los siguientes términos:
“¡Vamos a hacer un país mejor, por nosotros mismos!”, dijo.