Las más de ocho millones de personas que han sido convocadas a participar en un inédito y controvertido referendo en Cuba pueden votar hoy con el propósito de legalizar o no el matrimonio igualitario y otras novedades en materia de derechos humanos, siendo ejercicio que el gobierno de Miguel Díaz-Canel ha promovido como respaldo al socialismo.
Los colegios electorales abrieron sus puertas a las 07:00 horas locales, y se mantendrán activos hasta las 18:00 horas, en una jornada que se realiza ante los anuncios de cortes de la electricidad y el avance de la tormenta tropical Ian, que según el Instituto de Meteorología impactará al país caribeño como huracán entre la noche de mañana y el martes.
Alina Balseiro, presidenta del Colegio Electoral Nacional (CEN), anunció que “a las seis de la tarde se desarrollará el escrutinio (manual), que es público. Las personas podrán presenciar el conteo, aunque las boletas las tocarán únicamente quienes están en la mesa electoral”.
Aunque este ejercicio es de carácter voluntario, el gobierno ha realizado una intensa propaganda a favor de la aprobación del código desde hace más de un mes. Esta previsto que a las 20:00 horas el CEN emita un primer parte parcial. El resultado definitivo se conocerá en la tarde del lunes.
Este referendo, único de su tipo en Cuba y en el resto del mundo, se realiza sin supervisión internacional y en medios diplomáticos se da por descontada la victoria del Sí. La vista de analistas está puesta en los porcentajes de participación y de votos negativos por las circunstancias de profunda crisis económica que padece el país.
“Sí por la revolución y el Socialismo”, pidió el presidente cubano
Pocas horas antes del inicio de referendo, la televisión nacional transmitió un mensaje en el cual el presidente Miguel Díaz-Canel hizo el siguiente comentario: “Vamos a votar con el corazón. Votar Sí, es decir Sí por la unidad, por la revolución, por el Socialismo y por Cuba”.
Díaz-Canel y su esposa, Lis Cuesta, votaron sobre las 07:50 horas locales en el municipio habanero de Playa. “Este es un código que partió del debate popular; creo que habrá una votación mayoritaria a favor; hemos asumido una posición de valentía al realizarlo en un momento tan complejo”, dijo el mandatario en esa ocasión.
De ser aprobada por más del 50 por ciento de los votos que se emitan, la ley entraría en vigor mañana porque ya fue publicada en la Gaceta Oficial tras ser aceptada por unanimidad en el Parlamento unicameral. Sustituiría al código vigente desde 1975.
Entre las muchas novedades de la legislación figuran la aceptación del matrimonio igualitario, el derecho de esas parejas a adoptar hijos y el respaldo legal a herencias en caso de fallecimiento de alguna de las partes; sustituye el tradicional concepto de “Patria Potestad” por el de “Responsabilidad Parental”; refuerza la protección legal de niños y adolescentes, así como de abuelos y personas con alguna discapacidad; y eleva a 18 años la edad mínima para contraer matrimonio.
En ocho países de América Latina han autorizado el matrimonio igualitario, aunque sin someterlo a referendo.
En tanto, el concepto de “Responsabilidad Parental”, en sustitución de la “Patria Potestad”, está incluido en la Convención Internacional sobre los Derechos de los Niños desde 1989.
Opiniones diversas sobre la nueva ley
Grupos opositores en la isla y el ala radical del exilio han llamado a votar por el No a fin de evitar un eventual fortalecimiento del gobierno. Varias denominaciones religiosas, incluida la Iglesia católica, se oponen el espíritu de género que impera en el código, y entre cubanos mayores de 60 años de edad hay rechazo al matrimonio gay.
El abanico de opiniones incluye incluso a quienes consideran innecesario el refrendo.
“El Código de Familias no debió someterse a plebiscito. Dejar como posibilidad el No en temas como el matrimonio igualitario fue negociar derechos por votos en el referendo por la Constitución de 2019. Es hacer rehén a varias comunidades sociales de una mayoría electoral, cuando las mayorías no pueden decidir sobre derechos fundamentales”, consideró el investigador cubano Julio César Guanche.
En esos términos, Guanche se refirió al rechazo a que el matrimonio igualitario figurara en la Carta Magna, registrado durante el debate popular previo a su aprobación. Esa Constitución fue aprobada en 2019 por el 78.30 por ciento de los electores.