Los militares de Níger que derrocaron al presidente elegido democráticamente, Mohamed Bazoum, acusaron a Francia, antiguo poder colonial, de querer "intervenir militarmente" en el territorio.
Esto ocurrió un día después de que países de África Occidental amenazaran con usar la "fuerza" si no se restablece el orden constitucional.
La jefa de la diplomacia francesa, Catherine Colonna, desmintió las acusaciones de la junta. "Es falso", declaró a la cadena de televisión BFMTV.
La ministra dijo que es "posible" restablecer en sus funciones al presidente Mohamed Bazoum. "Y es necesario, pues esas desestabilizaciones son peligrosas para Níger y sus vecinos", subrayó.
Incluso recordó el elevado número de banderas rusas que exhiben quienes apoyan el golpe y los eslóganes "de corta y pega" que se han visto en protestas antifrancesas y prorusas en otros países africanos.
"No creo que la gente duerma con una bandera rusa debajo de la almohada", ironizó.
Por todo ello, la jefa de la diplomacia francesa consideró "posible" que Rusia intente sacar "provecho" de la crisis, pero evitó responsabilizar a Moscú del golpe y lo atribuyó a "una acción oportunista" de un alto cargo militar.
La presión contra los golpistas, que tomaron el poder el 26 de julio, es cada vez más fuerte por parte de los aliados occidentales y africanos de Níger , un país clave en la lucha contra los grupos yihadistas que operan en el Sahel.
El general Abdourahamane Tiani, líder de la guardia presidencial, se autoproclamó el viernes como nuevo líder, justificando el golpe en la "degradación de la situación de seguridad" en el país, asolado por la violencia de grupos yihadistas como el Estado Islámico y Al Qaida.
Francia y Estados Unidos tienen desplegados respectivamente mil 500 y mil 100 soldados para participar en el dispositivo antiyihadista.
Los militares que han tomado el poder han centrado sus críticas en Francia, que brindó su apoyo al presidente Bazoum, que se encuentra retenido desde el miércoles en el palacio presidencial.
La junta acusó el lunes a Francia de haber lanzado el domingo gas lacrimógeno contra los manifestantes progolpistas delante de la embajada francesa.
"En su búsqueda de vías y medios para intervenir militarmente en Níger, Francia, con la complicidad de algunos nigerinos, mantuvo una reunión con el Estado Mayor de la Guardia Nacional de Níger, para obtener las autorizaciones políticas y militares necesarias" para restablecer a Mohamed Bazoum en sus funciones, aseguró la junta en un comunicado.
El lunes tuvo lugar una nueva manifestación de apoyo a la junta militar en Zinder, a 850 kilómetros al este la capital.
"Detenciones abusivas"
Los dirigentes y representantes de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) dieron el domingo un ultimátum a la junta militar con una semana de plazo para restablecer "el orden constitucional" y no descartaron "el uso de la fuerza" si esto no sucedía.
Esa organización regional, de la que Níger es miembro, también decidió "suspender todas las transacciones comerciales y financieras" entre sus Estados miembros y Niamey, así como congelar los bienes de los responsables militares implicados en el golpe.
El primer ministro nigerino, Ouhoumoudou Mahamadou, dijo a la cadena France24 que las sanciones "van a ser una catástrofe" tanto a nivel económico como social.
El Partido Nigerino para la Democracia y el Socialismo (PNDS, en el poder), denunció las "detenciones abusivas" de cuatro ministros (Interior, Petróleo, Minas y Transportes), un ex ministro y líder del partido. Fuentes cercanas a la presidencia también anunciaron la detención del Ministro de Educación Superior.
La Unión Europea (UE) advirtió el lunes que haría responsables a los golpistas de "cualquier ataque contra civiles, o el personal o las instalaciones diplomáticas".
La UE "apoyará rápida y firmemente" las decisiones de la CEDEAO, afirmó el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
Mientras, países como España y Alemania anunciaron la suspensión de la ayuda a la cooperación al país.
Rusia instó por su parte al "restablecimiento lo antes posible de la legalidad en el país" y pidió a las partes "moderación" para evitar pérdidas humanas, en palabras del portavoz de la presidencia, Dmitri Peskov.
Después de Malí y Burkina Faso, Níger es el tercer país de la región en sufrir un golpe de Estado desde 2020. Con 20 millones de habitantes, es una de las naciones más pobres del mundo, a pesar de sus recursos en uranio.
SNGZ