Estados Unidos retirará a más de 5 mil soldados en Afganistán y sólo mantendrá a 8 mil 600 una vez que entre en vigor el acuerdo de paz que negocia actualmente con los talibanes para poner fin a 18 años de guerra, anunció el presidente Donald Trump.
"Vamos a reducir a 8 mil 600 [efectivos] y luego evaluaremos a partir de ahí", dijo Trump en una entrevista con la radio de Fox News. "Vamos a tener siempre una presencia" en Afganistán, agregó.
Trump también dijo que si un nuevo ataque contra Estados Unidos se originase en Afganistán "volveríamos con una fuerza como nunca antes".
Estados Unidos envió tropas por primera vez a Afganistán luego de los ataques del 11 de septiembre de 2001 realizados por Al Qaeda, que era protegida por el anterior régimen talibán en su territorio. Actualmente, entre 13 mil y 14 mil militares estadunidenses están desplegados en el país.
Washington ahora busca acabar con su presencia militar y entabla negociaciones desde 2018 con los talibanes. Trump advierte que sólo ordenará la reducción del volumen de las tropas cuando los talibanes garanticen que su territorio no será usado por Al Qaeda u otro grupo yihadista.
Trump subrayó que no habrá un retiro total de la presencia estadunidense de Afganistán y que se mantendrá una fuerza para realizar labores de "alta inteligencia". "Hay que mantener una presencia", dijo.
No está claro lo que significará una salida de Estados Unidos para el gobierno afgano, cuyas propias fuerzas armadas entrenadas por los estadunidenses corren el riesgo de un nuevo ataque de los talibanes.
Por ahora, la Casa Blanca parece centrarse en la seguridad de Estados Unidos, especialmente en lo que respecta a asegurarse de que los talibanes mantengan su parte del trato.
"Somos conscientes de la historia de los talibanes...y su complicada historia con Al Qaeda, que es exactamente la razón por la cual cualquier acuerdo, si se llega a uno, será tan estrictamente monitoreado y verificado", dijo un vocero del Departamento de Estado.
"El acuerdo en el que estamos trabajando no se basa en la confianza; se basará en requisitos y compromisos claros, sujeto a nuestro monitoreo y verificación".
Las fuerzas estadunidenses fueron enviadas por primera vez a Afganistán después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en suelo estadunidense llevados a cabo por Al Qaeda, que fue protegida por el antiguo régimen talibán.
Unos 2 mil 400 soldados estadunidenses han muerto allí y unos 20 mil han resultado heridos.
Resumiendo la posición cautelosa de Estados Unidos en las negociaciones con los talibanes, el general Joseph Dunford, jefe del Estado Mayor Conjunto, dijo el miércoles que no llamaría al proceso un "retiro".
dmr