La Policía Nacional y las Fuerzas Armadas de Ecuador detuvieron a un hombre apodado Boris, considerado como uno de los "zares de la droga" en el país, mientras participaba en una "gran narcofiesta" en la que también estaban dos policías en servicio activo.
Boris fue uno de los dos detenidos en la mencionada fiesta, según señalaron en una rueda de prensa este miércoles representantes de la Policía y de las Fuerzas Armadas.
El presunto cabecilla del grupo delictivo Los Choneros tenía una detención anterior por el delito de asesinato en 2015 y por tenencia y porte de armas en 2020.
Así informaron la detención de Boris:
En el allanamiento al inmueble de la provincia costera de Guayas, donde tenía lugar la "narcofiesta", las fuerzas del orden se incautaron de cuatro pistolas, siete alimentadoras, 112 municiones, cuatro celulares, 2 mil 400 dólares (alrededor de 45 mil pesos) en efectivo, y cinco cheques por un total de 240 mil dólares (450 mil pesos).
Asimismo, encontraron un túnel y un sitio donde presuntamente se acopiaba droga, y se incautaron de cuatro vehículos de alta gama, uno de ellos con blindaje tipo V, que soporta un calibre de 7.62 milímetros.
Policías en servicio de Ecuador estaban en la fiesta
El comandante general de la Policía, César Zapata, informó que en el allanamiento al inmueble donde se realizaba la narcofiesta estaban dos policías en servicio activo que, aunque estaban en su día libre, portaban las armas cuando fueron capturados.
Ecuador sostiene un pulso contra las bandas del crimen organizado, dedicadas principalmente al narcotráfico, y a las que le se les atribuye el auge de la violencia en el país.
Este fue el arsenal decomisado por las fuerzas armadas de Ecuador:
La creciente ola de violencia criminal ha hecho que Ecuador haya pasado a figurar entre los países más violentos de Latinoamérica, con una tasa de homicidios de 47 por cada 100 mil habitantes en 2023, según datos del Observatorio Ecuatoriano de Crimen Organizado (OECO).
Desde inicios de año el gobierno del presidente Daniel Noboa ha elevado la lucha contra el crimen organizado a la categoría de "conflicto armado interno", con lo que ha pasado a catalogar a estas bandas como grupos terroristas y actores beligerantes no estatales.
aag