Ante el peor año de reclutamiento del ejército estadunidense, legisladores republicanos señalan problemas en el reclutamiento relacionados a que los nuevos integrantes no desean vacunarse contra el covid-19 y con temas raciales y de justicia social.
Sin embargo, ante las declaraciones de legisladores, el servicio militar dice que los principales desmotivadores son los más tradicionales; es decir, temor a morir, lesionarse y a lidiar con el estrés de la vida militar.
"Ellos simplemente no ven al Ejército como algo relevante. Nos respetan, pero no somo relevantes en sus vidas”, dijo el mayor general Alex Fink, jefe de marketing del Ejército.
Además de las condiciones mencionadas, aspectos como el ajustado mercado laboral agravan la situación.
Ante eso, la administración del presidente Biden ha ofrecido nuevos programas, publicidad e incentivos con el objetivo de cambiar las percepciones y revertir el declive.
Un incentivo otorga a los reclutadores bonificaciones de hasta 4 mil 500 dólares por trimestre si superan el requisito mínimo de alistamiento.
Año más bajo de reclutamiento
Este último año fiscal, faltaron unos 15 mil soldados para alcanzar su objetivo de reclutamiento de 60 mil el año pasado al ejército estadunidense.
Ante tal falta, la meta para este 2023 es de 65 mil soldados, 20 mil más que el año pasado.
aag