El ex mandatario estadunidense George W. Bush acusó a Rusia de entrometerse en la elección presidencial de su país en 2016 y describió al líder ruso, Vladímir Putin, como un “estratega brillante”.
Bush, quien dirigiera la Casa Blanca entre 2001-2009, declaró durante una entrevista en el marco de una conferencia empresarial en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), que había evidencia de la injerencia rusa, pero que si eso había afectado el resultado de la elección era otra cuestión.
“Pero se entrometieron y eso es peligroso para la democracia”, dijo el ex presidente republicano, quien agregó que Moscú hizo lo mismo durante la guerra fría (1947-1991), y que era experto en intentar manipular las opiniones en EU y Europa. “Putin es un estratega brillante que tiene la capacidad de detectar la debilidad y explotarla”, agregó.
El Kremlin ha negado repetidamente las acusaciones de funcionarios de inteligencia estadunidenses de intentar interferir en elecciones extranjeras, incluyendo los comicios de 2016 en Estados Unidos en los que Donald Trump resultó vencedor.
Actualmente existe una investigación abierta por el Departamento de Justicia sobre la presunta trama rusa en las votaciones para favorecer al republicano frente a su rival demócrata, Hillary Clinton.
Además, en una aparente crítica a las políticas de inmigración del magnate, Bush llamó a realizar cambios en las políticas migratorias, al destacar que era importante reconocer que EU tenía una historia de recibir inmigrantes sin importar su religión o procedencia.