Un festival internacional de cine que sus promotores llaman a disfrutar “a lo grande” y el seguimiento en vivo por la televisión pública del mundial de fútbol de Qatar, se han convertido en una especie de bálsamo para los cubanos, atenazados por una crisis económica profunda y otra electroenergética con apagones diarios.
La edición 43 del Festival del Nuevo Cine Latinoamericano se desarrollará hasta el 11 de diciembre en cuatro salas de La Habana con el propósito de destacar “a la oleada de nuevos jóvenes realizadores que enaltecen las esencias de la región, a partir de una mirada inquieta y cuestionadora”, dijo Yumey Besú Bayo, presidente de la muestra.
Y desde la misma apertura en el cine Chaplin de la capital cubana, el festival fue de la estremecedora realidad actualizada por la cinta “Argentina 1985”, de Santiago Mietre, a la picardía política que en tiempos de crisis se multiplica entre los cubanos, aunque pudiera no agradar a los altos cargos del Partido Comunista (PCC) y del gobierno presentes en la ceremonia.
La película argentina que inauguró la muestra aborda el dramático e inédito juicio seguido a los principales jefes de la última dictadura militar argentina (1976-1983), en tanto el segmento musical corrió a cargo del cubano X Alfonso, quien interpretó temas clásicos y de su repertorio más reciente, con una buena carga de crítica social.
La nota de humor la puso la joven comediante Andrea Doimeadios, quien en sus monólogos abordó la estampida migratoria que ha provocado la crisis y hasta llegó a bromear preguntándose cuál sería el contenido de trabajo del poderoso Departamento Ideológico del PCC, concebido para supervisar y controlar el cine nacional, el quehacer de la prensa y de otros sectores de intelectuales y artistas.
Aunque en La Habana hay apagones de cuatro y seis horas diarias repartidos de manera alterna entre los 15 municipios de la ciudad, ni en el cine Chaplin ni en los tres restantes en los que se exhiben 185 obras (México participa con dos películas en concurso), se han reportado cortes de electricidad, un mal que sufre el país desde mayo pasado y que el gobierno ha prometido disminuir este último mes del año.
El festival ha vuelto a la normalidad después de que el año anterior se celebró en dos partes vía online por los cierres que impuso la pandemia de covid-19.
Cazándole la pelea a los apagones
No obstante, los cientos de miles de seguidores que tiene el fútbol en Cuba no han corrido con la misma suerte en cuanto a evadir la dura cotidianidad siguiendo el mundial de Qatar sin los irritantes apagones, que al interior del país abarcan hasta las madrugadas.
“Chico yo le cazo la pelea a los apagones, veo la programación del día y este sábado que entramos en octavos de final por suerte no me toca, me quitaron la luz ayer cuatro horas y hoy pude ver ese partidazo Argentina-Australia (2-1) y a la mañana el de Países Bajos- Estados Unidos (3.1)”, comentó a MILENIO el septuagenario Juan Jaume Becerra.
Jaume Becerra recuerda que el día de la apertura del mundial “me dejaron sin luz a los 15 minutos de iniciada, pero seguí en retransmisión por la noche el partido de la jornada, ya sabía el resultado, pero chico esto es una copa del mundo y hay que ver jugar a los mejores y hasta los papelazos que han hecho algunos equipos como aquel de Polonia frente Argentina en la fase de grupos”.
El ingeniero Lázaro Guerra anunció para hoy un déficit de generación de 731 megawatts en el horario nocturno, el más bajo en varios días, e insistió en que “marcha bien” el plan previsto para disminuir los apagones este mes. Esta madrugada no se registraron interrupciones en el servicio eléctrico.
MO