En Perú, justicia rechaza recurso que buscaba liberar y restituir a Pedro Castillo

El recurso también busca dejar sin efecto todas las resoluciones judiciales, ejecutivas, legislativas y leyes que objetaron la condición de Castillo como presidente constitucional del Perú.

Ex presidente de Perú, Pedro Castillo (Reuters)
Editorial Milenio
Lima, Perú /

La Corte Superior de Lima (CSJ) rechazó este lunes un recurso de "libertad inmediata" del ex presidente peruano Pedro Castillo y su reincorporación como presidente del país, alegando que se imputaba su libertad personal.

Un recurso de apelación de la Federación Nacional de Abogados del Perú, también a favor del ex primer ministro Castillo Aníbal Torres, fue declarado improcedente por la jueza Gisela Haydee Ocaña.

"Sexto Juzgado Constitucional de CSJ de Lima declaró improcedente hábeas corpus presentado a favor de Pedro Castillo y Aníbal Torres por supuesto atentado contra la libertad individual y motivaciones de resoluciones judiciales", informó el CSJ de Lima en Twitter.

El recurso también busca dejar sin efecto "todas las resoluciones judiciales, ejecutivas, legislativas y leyes que objetaron" la condición de Castillo como presidente constitucional del Perú.

En la resolución, Ocania afirmó que el recurso de hábeas corpus del Colegio Nacional de Abogados fue "irrazonable, ignorante de los principios y valores constitucionales" e "irrespetuoso con los derechos fundamentales".

La semana pasada, Castillo solicitó a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que ordenara al gobierno peruano su "liberación inmediata" y la restitución del presidente del país.

El ex presidente, quien ganó las elecciones de 2021, cumple actualmente una condena de 18 meses en prisión preventiva mientras el Ministerio Público investiga si es sospechoso de rebelión tras un autogolpe fallido el 7 de diciembre.

En un discurso a la nación ese día, Castillo anunció que cerraría el Congreso, crearía un ejecutivo de "emergencia nacional", lo administraría por estatuto y reorganizará el poder judicial.

Su decisión fue definida por la mayoría de los peruanos como un golpe de estado, y Castillo fue arrestado por su propia escolta poco después de pronunciar el discurso cuando se dirigía a la embajada de México en Lima, supuestamente para solicitar asilo.

Mientras tanto, el Congreso votó abrumadoramente para destituirlo.

En cambio, su vicepresidenta, Dina Boluarte, asumió el cargo en una sucesión constitucional, lo que provocó protestas en todo el país, pidiendo la renuncia de la nueva mandataria, el cierre parlamentario y elecciones generales en 2023.

Las protestas, que hasta el momento han dejado 70 muertos y miles heridos, se sienten en todo el territorio nacional desde hace dos meses, aunque primero se concentraron en el sur del país, hoy bastión del descontento ciudadano.

MbG


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