Como estaba previsto, Begoña Gómez, esposa del presidente de España, Pedro Sánchez, se acogió a su derecho a no declarar en su citación a la comisión de investigación abierta en la Asamblea de Madrid para aclarar si hubo trato de favor con ella en la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
Gómez tomó la palabra un minuto para denunciar el “objetivo político” de esa comisión de investigación, la “colección de denuncias” que se han presentado contra ella y los “bulos” que se han vertido.
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Además, advirtió que “más pronto que tarde, la verdad pondrá las cosas en su sitio” y reiteró que no haría más declaraciones en la comisión que inició hoy y en la que también está citado Pedro Sánchez, que no acudirá porque la Asamblea no tiene potestad para obligarlo.
La esposa del presidente del Gobierno guardó silencio a cada pregunta que le formuló la portavoz del conservador Partido Popular (PP), Mercedes Zarzalejo, que aprovechó su mayoría para crear la comisión, calificada por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) de Madrid como un “circo” y un “show” montado por la derecha y la ultraderecha (Vox).
En su intervención inicial, Begoña Gómez recordó que desde hace 25 años trabaja en consultoría y docencia: “He coordinado equipos, he dirigido proyectos, he asesorado a más de medio centenar de profesionales”.
Asimismo, aseguró que lleva 20 años en colaboración con la Universidad Complutense y es en 2020 cuando esa colaboración en la Universidad Complutense se amplía con una cátedra extraordinaria, “que es práctica habitual en las universidades públicas, y no renumerada”.
Begoña Gómez está siendo investigada por el titular del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid, Juan Carlos Peinado, por presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción, además de apropiación indebida del software de la Complutense e intrusismo profesional. Todo ello tras las denuncias del colectivo ultraderechista Manos Limpias y el partido de ultraderecha Vox y otros organismos similares.
Aunque su asistencia era obligatoria, el hecho de que no declarara no evitó, sin embargo, que Gómez tuviera que asistir en la Asamblea a cuenta de la comisión impulsada por la derecha representada por el PP, ni toda la expectación mediática que amplifica el caso de cara a la opinión pública.
CHZ