El Centro Nacional de Inteligencia (CNI) confirmó que se espió a varios políticos independentistas, como en su momento lo develó The New Yorker, mientras que del hackeo de los teléfonos móviles del presidente del gobierno, Pedro Sánchez, y su ministra de Defensa, Margarita Robles, apuntó a que se hizo desde otro país o por miembros de las llamadas “cloacas” del Estado.
Así lo aseguró el portavoz en el Congreso de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), Gabriel Rufián, tras acudir a la comparecencia de la directora del CNI, Paz Esteban, ante los portavoces parlamentarios que integran la Comisión de Gastos Reservados.
Rufián, escéptico en todo momento, aseguró que después de escuchar a la titular del CNI, al que el gobierno ya no respalda, señaló que “salimos como hemos entrado, no ha habido secretos, ni oficiales, ni extraoficiales”. Una comparecencia a la que no fue permitido el acceso a la prensa y que incluso se prohibió a los diputados utilizar el teléfono móvil.
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Un portavoz de ERC contó que Esteban acudió a la comisión con documentación que contenía las autorizaciones judiciales para las escuchas que hizo el CNI.
El pasado lunes el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, convocó a los medios de comunicación para anunciar que el sistema Pegasus había infectado los móviles del presidente Pedro Sánchez y Margarita Robles.
Se sabe que durante el primer ataque al móvil del presidente Sánchez le robaron 2,6 gigas y en el segundo 130 megas. En cuanto al teléfono de la ministra de Defensa se sustrajeron apenas 9 megas de información.
Se contempla que el espionaje al presidente del Gobierno, tuvo lugar en mayo y junio del año pasado, un momento particularmente delicado en la política española.
ATC