España extraditó este jueves a Estados Unidos a Claudia Díaz Guillén, conocida como la enfermera de Hugo Chávez, acusada de lavado de dinero cuando fue ex tesorera del gobierno, informó un vocero de la Audiencia Nacional, el tribunal que se encarga de los procesos de extradición.
Claudia Patricia Díaz, quien dirigió el Tesoro Nacional de Venezuela entre 2011 y 2013, está acusada, junto a su marido, Adrián José Velásquez Figueroa, de participar en una amplia trama de corrupción, que pasó por las casas de cambio y permitió el desfalco de 2 mil 400 millones de dólares, según el Departamento del Tesoro en Estados Unidos.
Díaz Guillén tiene una cita este viernes ante un juez de West Palm Beach, a 100 kilómetros al norte de Miami, según documentos judiciales.
Esta es la única información oficial que confirmaría su inminente llegada a Estados Unidos, que la reclamó a España para responder por los delitos de "soborno y lavado dinero".
Los dos fueron declarados prófugos de la justicia estadunidense en abril de 2021, junto al empresario Raúl Gorrín Belisario.
La Audiencia Nacional española autorizó en noviembre pasado la extradición a Estados Unidos de Diaz Guillén.
El matrimonio, residente en Madrid, España, fue acusado en diciembre de 2020 por su presunta participación en una "trama de lavado de dinero y cambio de moneda" por valor de "miles de millones de dólares", según informó el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La acusación fue presentada por la Fiscalía del Distrito Sur de Florida por el cargo de "conspiración para cometer blanqueo de capitales" y otros dos por "blanqueo de capitales".
La acusación alega que Raúl Gorrín Belisario, de 52 años, dueño y presidente del canal venezolano Globovisión, pagó millones de dólares en sobornos a dos ex tesoreros nacionales venezolanos, Alejandro Andrade Cedeño y Claudia Díaz Guillén.
También pagó a Velásquez, en beneficio de ella, "para asegurar corruptamente los derechos de realizar transacciones de cambio de moneda extranjera para el gobierno venezolano a tasas favorables".
Gorrín, señala la acusación, "transfirió dinero electrónicamente para beneficio de Andrade y Díaz, incluido dinero para jets privados, yates, casas, caballos campeones, relojes de alta gama y una línea de moda."
El empresario de medios venezolano fue acusado formalmente en agosto de 2018 como cómplice de "conspiración para lavado de dinero" y "lavado de dinero".
Por su parte, Andrade Cedeño, también ciudadano venezolano, fue sentenciado a diez años de prisión en noviembre de 2018 por su "participación en la conspiración para cometer lavado de dinero".
Como parte del acuerdo de declaración de culpabilidad, Andrade admitió que recibió más de mil millones de dólares en sobornos de Gorrín y otros implicados "a cambio de usar su posición como tesorero nacional venezolano para seleccionarlos para realizar transacciones de cambio de moneda a tasas favorables para el país".
JLMR