Una mujer de 62 años que llegó a España desde Bolivia hace más de dos décadas fue exonerada de una deuda que tenía pendiente tras contratar créditos en dos entidades.
De acuerdo al diario ABC España, la mujer devolvía el préstamo mes con mes de manera puntual hasta que la pandemia de covid impidió que ella siguiera abonando el préstamo.
"Yo quería pagar, pero caí muy enferma y todo se desmoronó", debía un total de 34 mil 557 euros, de los cuales pagó 19 mil 052 euros y ahora, en virtud de la ley ya no tendrá que pagar el resto y tampoco será incluida en ningún fichero moroso.
Cuenta que el préstamo fue hace diez años, pagando mensualmente 600 euros que salían de un sueldo que no llegaba a los 900, pero pudo mantener así a sus hijas y ayudarles con los estudios, además de poder comprar un terreno en su país.
Pero después se enfermó y con la prestación por desempleo no era suficiente para asumir todas las deudas, entonces, intentó negociar con las entidades sin éxito y desesperada, acudió a la Asociación de Ayuda al Endeudamiento, siendo ésta su única salida.
"Una vez iniciado este procedimiento, la deudora puede empezar a dejar de pagar todas sus deudas, pudiendo destinar el total de sus ingresos a gastos esenciales como comida, transporte, suministros, incluso a un pequeño ahorro", explica Andrea Olcina, abogada de la asociación.
Se envió una propuesta a los bancos pero no aceptaron, sin embargo, el tribunal vio que la mujer tenía un documento escrito con el que podía probar que había intentado solucionar extrajudicialmente su problema y los abogados presentaron una demanda de concurso de acreedores y la solicitud de perdón de toda deuda pendiente.
Ahora, el fallo de la magistrada permitirá a la boliviana centrarse en su salud. "Todavía no sé qué va a pasar conmigo. No puedo trabajar, no puedo estar mucho de pie, me cuesta caminar... Y no sé si me van a dar la incapacidad", narró preocupada. Ahora, su mayor deseo es recuperarse y regresar a Bolivia.
LG