Un distrito escolar del área de San Diego, California, votó el martes por la noche para despedir al entrenador de básquetbol después de que se lanzaran tortillas a un equipo de una escuela secundaria mayoritariamente latina.
La Junta Escolar Unificada de Coronado votó 5-0 en una sesión cerrada para determinar el despido del entrenador JD Laaperi y también se discutieron medidas sobre la disciplina estudiantil, informó el San Diego Union-Tribune.
Los hechos ocurrieron el sábado cuando el equipo de Coronado, una escuela en su mayoría de estudiantes blancos, venció a la escuela secundaria Orange Glen 60-57 en tiempo extra durante un campeonato de básquetbol.
- Te recomendamos Lanzan tortillas a equipo de alumnos latinos en escuela de California, EU Estados Unidos
Los testigos alegaron que Laaperi gritó improperios a un entrenador de Orange Glen, diciendo: "Saque a sus hijos y saque el (improperio) de aquí", dijo el Union-Tribune.
El video compartido en las redes sociales mostró al menos a dos estudiantes de Coronado lanzando tortillas hacia el otro equipo.
El superintendente del Distrito Escolar Unificado de Coronado, Karl Mueller, emitió un mensaje público de disculpa el domingo en el que calificó el acto de "reprensible".
En un tuit el sábado, Laaperi dijo que un miembro de la comunidad trajo tortillas al juego y dijo que el incidente era "inaceptable y de naturaleza racista".
“No apruebo este comportamiento. Coronado High School no aprueba este comportamiento y ya está tomando las medidas adecuadas”, tuiteó.
Ambos distritos escolares, junto con la policía de Coronado y la Federación Interescolar de California, están llevando a cabo investigaciones sobre el incidente.
Wayne McKinney, capitán del equipo de básquetbol de Coronado, ha dicho que los jugadores y entrenadores habían recibido mensajes de odio y amenazas de muerte por el incidente, según el Union-Tribune.
El martes, calificó el lanzamiento de tortillas como antideportivo, pero no como un acto de intolerancia.
“No se basó en la raza o la clase; fue simplemente un gran juego entre dos equipos ”, dijo McKinney. "Creo que mucha gente está haciendo que el sábado sea algo que no fue".
“Incluso si no tenían la intención de ser racistas, no podemos ignorar que nuestros invitados, estos niños que jugaron con todo su corazón por un campeonato, se sintieron atacados porque eran hispanos”, dijo la fideicomisaria de la escuela de Coronado, Whitney Antrim, durante la reunión.
En una carta a la comunidad el martes, la superintendente del distrito de escuelas secundarias de Escondido Union, Anne Staffieri, dijo que después de su investigación, el distrito quiere reunir a los estudiantes de ambos equipos para que "hablen entre sí y se fortalezcan a través de discusiones honestas y disculpas sinceras".
evr