Este jueves, el Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles anunció el arresto de un padre y su hijo por estar presuntamente relacionados con 3 asesinatos en el estado de California en los años 2014 y 2018. A pesar de que no se han revelado los motivos del vínculo, la policía cree que los dos hombres estaban relacionados con las víctimas.
Manuel Velásquez de 51 años y su hijo Anthony Velásquez de 31 años fueron buscados por la policía de California, ofreciendo una recompensa de 80 mil dólares a quién diera información verídica sobre su paradero. Aunque no estaba claro, si alguien cobró la recompensa.
Sin embargo, durante la madrugada del jueves, padre e hijo fueron arrestados al este de Los Ángeles. No obstante, aún no se confirma si los presuntos culpables ya cuentan con un abogado que pueda hablar en su nombre.
Las víctimas Jesse Avalos de 34 años, Eduardo Robles de 38 años y Amanda “Nikki” López de 27 años fueron asesinados dentro de un perímetro de 2.2 millas (3.54 kilómetros) de cada uno, a excepción de uno que sucedió al este de Los Ángeles.
Por su parte, las autoridades y detectives del caso aseguran que durante los asesinatos de Jesse Avalos en 2014 y Eduardo Robles en 2015, se utilizó la misma pistola para cometer dichos crímenes. Los testigos de los 3 asesinatos describieron a un sospechoso similar y su conductor de fuga mayor.
El asesinato de Jesse Avalos sucedió en 2014, cuando Avalos recibió una llamada telefónica para arreglar un automóvil, Jesse ayudó a la persona y horas después, fue encontrado baleado en el asiento del conductor de su camioneta.
El capó del vehículo estaba abierto y se vieron dos sospechosos cerca de la camioneta. Mientras que el homicidio de Eduardo Robles fue en medio de una pelea mientras visitaba una casa al este de Los Ángeles.
La policía de Los Ángeles reveló que Anthony Velásquez saltó una valla a la calle para pinchar los neumáticos del vehículo de Robles. Cinco minutos después, Anthony regresó y le disparó a Robles para luego huir.
Sin embargo, Eduardo Robles no murió, entonces Anthony Velásquez regresó 5 minutos después, para dispararle varias veces y huir nuevamente. En este homicidio, Manuel Velásquez está acusado de recoger a su hijo y huir.
Mientras que el homicidio de Nikki López sucedió cuando presuntamente Anthony Velásquez le disparó mientras dormía dentro de una carpa en un campamento para personas sin hogar, frente a la oficina de campo de un funcionario electo local.
Ante este caso, la diputada Grace Medrano dijo este jueves, que los investigadores de homicidio no han etiquetado a los Velázquez como asesinos en serie, pero podrían hacerlo en el futuro.
wgp