En 2017, un veterano iraquí recibió varios disparos por parte de la policía de Sacramento, resultando gravemente herido al estar en medio y durante un enfrentamiento con la policía. Así que el ayuntamiento de Sacramento pagará $3.25 millones de dólares como recompensa.
Kristopher Vélez recibió al menos 4 golpes en el pecho, hombro, brazo y pierna. Además, sufrió de huesos rotos y daños notorios en los nervios, resultando estar parcialmente discapacitado, encima de necesitar cirugías adicionales, de acuerdo con la demanda federal que alega negligencia y fuerza excesiva.
Así que en agosto, el ayuntamiento de Sacramento acordó resolver la demanda, pero no anunciaron la resolución en una sesión abierta. Por lo que los medios locales, tuvieron que acudir a un solicitud de la Ley de Registros Públicos de California.
Los policías habían llegado a atravesar una ventana de la casa de Vélez, para detenerlo en septiembre de 2017, debido a que había faltado a una cita en la corte por un delito menor. Además, a Kristopher Vélez le habían diagnosticado un trastorno de estrés postraumático, por lo que al escuchar los ruidos, entró a su baño con una pistola.
La demanda de Vélez decía que en un momento disparó accidentalmente antes de que un sargento de policía lo convenciera de salir del baño.
“El sargento interactuó tranquilamente con Vélez y le aseguró que podía salir sin peligro del baño y dejar el arma y que nadie lo iba a lastimar”, dice la demanda. “Después de un tiempo, Vélez salió del baño y, tras aceptar las garantías del sargento, dejó la pistola en el suelo, momento en el que inmediatamente le dispararon”.
Un comunicado de la policía emitido en octubre de 2017 dijo que Vélez había "mostrado el arma en dirección a los oficiales".
Vélez nunca fue acusado de ningún delito y el sargento que le disparó todavía estaba en la fuerza policial en abril, informó Bee. En un comunicado, el portavoz de la ciudad, Tim Swanson, dijo que el acuerdo de conciliación era "justo y razonable".
wgp