La familia de una de las 10 víctimas fatales del tiroteo en una escuela de Texas, ocurrido la semana pasada, interpuso una demanda en contra de los padres del atacante, acusándolos de negligencia por dejar sus armas al alcance de su hijo.
Con la demanda, interpuesta la víspera en una Corte Estatal del condado de Galveston por Christopher Stone y Rosie Yanas, los padres del joven Christopher Jake Stone buscan una indemnización de un millón de dólares por daños y perjuicios.
La querella sostiene que Antonios Pagourtzis y Rose Marie Kosmetatos, padres del presunto tirador Dimitrios Pagourtzis, fueron negligentes al permitir que su hijo accediera a sus armas y municiones, al no obtener asesoramiento y servicios de salud mental para su hijo, y por no advertir adecuadamente al público de las "propensiones peligrosas" del adolescente y por confiarle sus armas.
Dimitrios Pagourtzis, un estudiante de preparatoria, fue arrestado el pasado 18 de mayo, acusado de asesinato capital después de presuntamente acribillar a Stone, de 17 años, y otras nueve personas en la escuela Santa Fe High School en la comunidad de Santa Fe, al sureste de Houston.
Pagourtzis, estaba armado con una escopeta y un revólver calibre .38 que pertenecía a su padre, según informó el gobernador de Texas, Greg Abbott.
"Si el asesino no hubiera tenido a su alcance las armas para su carnicería, su rabia bien podría haber continuado oculta a fuego lento en su interior, pero la sangre de la vida de su maestro y sus compañeros (...) no habría sido tan horrible, cruel e innecesariamente derramada”, se indicó en la demanda.
Tras el tiroteo en la escuela, el más mortífero desde que murieron 17 personas el 14 de febrero pasado en Parkland, Florida, el gobernador Abbott celebró una cumbre de tres días sobre violencia con armas de fuego.
gcc