El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fue escoltado abruptamente desde la sala de reuniones de la Casa Blanca por agentes del Servicio Secreto poco después de que comenzara a informar a los reporteros el lunes.
Minutos después de una sesión informativa, Trump fue sacado de la habitación sin explicación de la interrupción. El secretario del Tesoro, Steve Mnuchin, y el director de la Oficina de Gestión y Presupuesto, Russ Vought, también fueron sacados de la habitación y se cerraron las puertas.
El mandatario reapareció poco después en la sala de prensa, donde los periodistas habían quedado confinados, y anunció que alguien había recibido un disparo afuera de la Casa Blanca.
"Los agentes del orden le dispararon a alguien, parece ser el sospechoso. Y el sospechoso está de camino al hospital", dijo.
Trump dijo que no sabía nada sobre la identidad o los motivos de la persona baleada, pero cuando se le preguntó si la persona estaba armada, respondió: "Por lo que tengo entendido, la respuesta es sí".
El tiroteo sucedió cerca de la calle 17 y la avenida Pennsylvania, a unas cuadras de la Casa Blanca, según dos fuentes enteradas de la situación que no estaban autorizadas para hablar públicamente sobre ella. La policía todavía trataba de determinar el móvil del sospechoso.
El sospechoso fue trasladado a un hospital local, y el departamento de bomberos del Distrito de Columbia dijo que el hombre sufrió heridas graves o posiblemente críticas. Las autoridades investigaban si el individuo tenía antecedentes de enfermedad mental.
El mandatario elogió al Servicio Secreto por su labor para mantenerlo a salvo. Al preguntarle si estaba alterado por el incidente, Trump preguntó a la prensa: “No sé. ¿Parezco alterado?”
dmr